19-06-2009El primer candidato a legislador porteño por Proyecto Sur, junto con el candidato a diputado Gabriel Puricelli, participó de una charla con los estudiantes de la facultad de Ciencias Sociales a nueve días de las elecciones. Sentado en un círculo de estudiantes, Fabio Basteiro, primer candidato a legislador porteño y Secretario General de CTA Capital, compartió con los jóvenes sus experiencias e impresiones acerca de la reconstrucción del campo popular frente al neoliberalismo en la Argentina. Dio comienzo a la charla el sociólogo Puricelli, quien disertó acerca de los diversos modelos de sindicalismo vigentes en América Latina, refiriéndose particularmente a los casos de Venezuela, Brasil, y Chile: “Algo que atraviesa a la historia del movimiento obrero en estos países, particularmente en la segunda mitad del siglo veinte, es la existencia de un sindicalismo surgido en el marco de la instauración del modelo sustitutivo. Cuando el modelo sustitutivo de la región entra en crisis, a veces más profunda, a veces menos, aparecen centrales que sostienen otro modelo sindical. Esto implica, en muchos casos, otra forma de concebir al trabajador “. Fabio Basteiro tomó la posta para referirse al caso argentino. “Cuando hablamos de nuevo sindicalismo tenemos que tener cuidado, porque nosotros, como trabajadores nucleados en la CTA, intentamos aprender de las mejores experiencias de la clase trabajadora. Todo lo nuevo tiene una historia». Luego, el candidato enfatizó la necesidad de avanzar hacia la libertad y la democracia sindical: “Es imprescindible que los laburantes puedan, en sus ámbitos de trabajo, darse la forma de organización y la representación que ellos crean convenientes. Nadie les dice a los empresarios en qué cámara tienen que entrar para defender sus intereses”. Finalmente, habló acerca de su candidatura por Proyecto Sur, en el marco de la construcción de una herramienta política: “Cuando en la CTA hablamos de autonomía, no decimos “autismo” ni “antipolítica”; es evidente que los trabajadores debemos dar y damos todos los días una batalla que abarca los salarios, los precios, pero al mismo tiempo es mucho más que eso. La disputa es por un modelo de país”.