Por Daniel Lezana, hijo de Luis Lezana.
Un chico de 16 años, adoptado por un homosexual envió una carta a los senadores que debaten el matrimonio entre personas del mismo sexo. En el texto dice: «¿Ustedes entienden con el corazón lo que es ser gay? Mientras tanto, la cámara alta sigue con el tratamiento del proyecto.
Este es el texto completo de la carta:
Sres. Senadores:
Mi nombre es Daniel Lezana, soy hijo de Luis Lezana, tengo 16 años y nos adoptamos hace seis, por eso ahora puedo llevar nuestro apellido.
El martes 8 de junio, estuve con mi papá en el Senado, escuchando las distintas opiniones, entonces yo, también quiero dar mi opinión.
Yo no divido a la gente por su sexualidad, heteros, homos, travestis… y demás, posibilidades.
Mis padres biológicos eran heterosexuales y por esas cosas de la vida, con mi hermanito, terminamos viviendo en un hogar (no quiero hablar del por qué).
Cuatro veces más, intentaron adoptarme, familias heterosexuales, y me devolvieron, porque decían que era travieso, una vez me devolvieron por que les puse mucha comida a los pececitos y se murieron, al parecer por comer mucho. Y las otras veces no recuerdo bien, sólo tenía más o menos 8 añitos.
Con todo esto, yo no digo que todos los heteros son malos, es más, yo soy hetero, me gustan las chicas y soy buena persona.
A los 10 años, apareció en el hogar Luis, mi papá del alma, como nos llamamos nosotros. Entonces el juez me dijo: «Mirá Dani , hay un Sr. soltero, que tiene un perro grande que se llama Carolo, y quiere adoptarte». Yo no lo podía creer, había una nueva esperanza para mí, yo pensaba que iba a terminar en el hogar como muchos de los chicos grandes. Ya a mi hermanito lo habían adoptado por que era muy chiquito, el si había tenido suerte… y yo, ya era grande, ¿por qué nadie me quería?… todas las noches me lo preguntaba, hasta que me dormía, sin respuestas…
Y así fue que nos vinimos a Buenos Aires. Al principio no fue fácil, Luis es arquitecto, así que la casa siempre es un lío, siempre esta remodelando algo, no tiene descanso… jajaja. Luis es re hincha, todo el día está diciendo: ¿estudiaste?, ¿te bañaste?, ¿te lavaste los dientes… ¡¡Ufa digo yo!!, ya estoy harto… pero, cuando me voy a dormir por las noches, sé que él siempre sube a taparme y a darme un beso en la frente, qué molesto… ¿no? jajaja.
Cuando pasó el tiempo y me animé a hablar con mi viejo de lo que es la homosexualidad, al principio, no me gustó, pero porque no lo entendía. A ustedes señores senadores, les debe pasar lo mismo ¿no…? ¿Ustedes entienden con el corazón lo que es ser gay?
Después con el tiempo, empecé a ver con mis ojos del corazón a Luis y Gustavo (su ex pareja, ahora se separaron)… también soy hijo de padres separados… ojo con mis traumas… jajaja. A mí, me hubiera gustado que Luis y Gustavo se casen, hubiera tenido dos papás.
Cuando vivíamos los cinco (había dos perros), todo era más divertido. Luis (mi viejo) era el malo y nosotros éramos sus víctimas… jajaja… era muy divertido, todos estábamos en su contra, él siempre tiene que organizar todo.
Según Luis (y yo me río mucho) tiene que ser madre y padre a la vez…¡es un personaje! A todos los hijos que se crían sólo con un papá o una mamá, les pasa lo mismo ¿no?, sus papas cumplen los dos roles, el mío lo hace y a veces, es re pesado.
Nosotros somos una familia, les guste o no a muchos, esta es mi familia.
Para los que piensan o creen que mi viejo me inculca el ser gay o me puede contagiar, ¡se equivocan! A mí me gustan las chicas y ¡mucho!, pero ¿qué pasa si fuera gay?, ustedes creen que es por que me crío un gay… mmm… yo no lo creo. Ahora que estoy escribiendo por los derechos de mi viejo y los míos, quisiera, que él se casara. Como me voy a casar yo el día de mañana.
Él, cuando se case, lo va hacer con otro gay, que sienta como él. No se va a casar con los heteros, ¿de qué tienen miedo?, ¿qué los gays son una plaga que nos van a invadir?, Si se casa mi papá, el boletín de la escuela lo van a poder firmar los dos, a las reuniones del colegio puede venir cualquiera de ellos. Quiero tener los mismos derechos que tienen mis compañeros del colegio, y si ellos (mis papás), se separan, tener los mismos derechos, que tienen los hijos de padres separados… sus hijos los tienen y yo no, ¿por qué?
Bueno, lo último, yo estoy orgulloso del padre que tengo, de él aprendo que en la vida hay que luchar por las cosas que queremos, y yo querido viejo , siempre estaré a tu lado.
Y por favor señores senadores, los gays se van a casar entre ellos, no tengan miedo, no se van a casar con ustedes.
Muchas gracias.
Daniel Lezana.