“Cada cosa que logramos es fruto de la organización” decía Claudia, alrededor de las seis de la tarde, en una de las paradas en la recorrida por el barrio de Los Hornos. Esta vez, en el Comedor La Esperanza de la organización territorial Justicia y Libertad.
Una vez más, las mujeres eran las protagonistas. Elsa del Comedor Gauchito, Elsa de Mujeres Adelante, Claudia de la Copa de Leche El Manantial, Mari de la Copa de Leche Virgen del Valle en el barrio San Carlos, eran sólo algunas de las que arrancaron las presentaciones, acompañadas de cerca por Cristobal, “Toto”, que oficiaba de guía barrial y presentador. Muy cerca, la inauguración del Centro de Integración y Participación, entre colores y peloteros se presentaba con carteles en la ventana anunciando los talleres, en esta iniciativa, que pretende trabajar en “la organización del barrio”.
Un espacio de encuentro, con paredes recién pintadas y chocolatada, alfajores de maicena, pastafrola y vocecitas permanentes de los pibes y las pibas que corrían del salón al pelotero, mientras de fondo una cumbia acompañaba la alegría.
De Gennaro, que acompañó y formó parte de la inauguración, tomó la palabra después de Toto. “En nuestro país es una inmoralidad que se nos muera un pibe por hambre. Comer en nuestro país debería ser una cosa garantizada”, y agregaba que “además de sobrevivir, tenemos que vivir. Porque somos esto, somos nosotros” decía entre el bullicio.
Hasta el Centro de Integración y Participación, se acercaron militantes de la Junta Promotora de la ciudad de La Plata, dirigentes sociales y sindicales, y los vecinos y vecinas del barrio. Caía la tardecita, cerca de las siete de la tarde, y un grupo iba a comenzar a cantar folclore, reconociendo las guitarras. El pelotero seguía lleno. Las zapatillas en la puerta gozaban del descanso y un montón de caras satisfechas acompañaban la caída del domingo.
Palabras de Toto Justicia y libertad