Lluvias que generan grandes mares en la provincia de Buenos Aires, planes, decretos y proyectos que no se cumplen, rutas que cada vez se ven más deterioradas, y pedidos de informes que aún no han sido contestados. Inundaciones: un problema de hace ya varios años.
Desde los años 80, la provincia ha sufrido grandes e intermitentes inundaciones. Desde entonces, sólo se tomaron medidas paliativas y de emergencia más o menos efectivas en el caso de defensa de las zonas pobladas, pero absolutamente ineficaces en la preservación de la zona rural.
En 1999 se decidió el estudio integral de toda la cuenca del Río Salado y la formulación de un Plan que para 2001 fue transformado en ley provincial. Paralelamente y debido a que la situación de inundación abarcó las principales provincias agropecuarias del país tales como Santa Fe, Córdoba y la Pampa conjuntamente con Buenos Aires, se conformó un fondo de emergencia hídrica a nivel nacional con un impuesto sobre los combustibles (Decreto 1381/01).
Pero desde entonces, y a causa del retroceso de esas aguas, las obras para prevenir nuevas catástrofes no se iniciaron. Desde el FAP, la diputada Rita Liempe, consideró la dimensión del tema, y se emitieron pedidos de informes al Poder Ejecutivo exigiendo una respuesta sobre el avance de las obras del Plan Maestro del Río Salado, las actividades y reuniones que se han realizado o que se prevén en los Comités de Cuenca, y las acciones, estudios y/o gestiones que ha realizado para resolver los efectos de las inundaciones que se han producido y para prever el agravamiento de la situación.
El caso de las inundaciones trae consigo un problema no menor: el deterioro de las rutas provinciales de los alrededores de las zonas afectadas, lo cual significa un problema para el transporte de mercaderías generando entorpecimiento de la correcta circulación vehicular. El mal estado de estos caminos, hace peligrar la salida de la producción agropecuaria.
Al respecto, Liempe también solicitó un pedido de informe en donde se notificara el presupuesto asignado en el Ejercicio 2012, a los caminos rurales y semirurales del partido de Lincoln, las obras contempladas y el avance de las mismas, e informar sobre la realización de inversiones que afecten la red secundaria de caminos y que no estén contempladas en el Ejercicio 2012.
