Así lo expresó la legisladora por Buenos Aires para Todos, Laura García Tuñón, ante la noticia y agregó: «sobre todo porque se llegó al consenso con una ley muy discutida en casi seis horas de debate el 27 de septiembre en donde se expusieron todas las posiciones y hubo una mayoría de votos para aprobarla». «Que Mauricio Macri la vete después, hay que entenderlo como una voluntad política manifiesta de cercenar un derecho, desoír el fallo de la Corte Suprema de Justicia e ignorar a la oposición».
Además, la legisladora miembro de la Comisión de Salud explicó «ahora el veto debe volver a la legislatura pero sabemos que no tenemos los 40 votos necesarios para volver a aprobarla. La intención de Macri es obturar la ley para que no se puedan realizar los abortos no punibles, rigiéndose por el protocolo del Ministerio de Salud, que es absolutamente restrictivo y no se condice con el fallo de la corte».