Por iniciativa del Presidente del Bloque Buenos Aires para Todos, Fabio Basteiro, la Legislatura porteña aprobó hoy en segunda lectura el proyecto que establece que la Estación Entre Ríos de la Línea E de Subterráneos lleve el nombre «Rodolfo Walsh».
El proyecto de ley, acompañado por otros bloques, tiene por objeto rendir homenaje al escritor y periodista Rodolfo Walsh, quien fuera secuestrado por un grupo de tareas de la sangrienta dictadura, un 25 de marzo de 1977, en las inmediaciones de dicha estación.
«Con esta iniciativa deseamos, además de evocar el compromiso y la valentía de Walsh, mantener viva la memoria de los porteños, las víctimas del terrorismo de estado y de esta manera, ratificar un compromiso de verdad y justicia». expresó Basteiro y agregó: «Es un orgullo para toda la militancia haber conseguido este reconocimiento y que lo estemos aprobando en esta semana de la memoria, cuando se están cumpliendo 37 años del golpe genocida».
Discurso de Fabio Basteiro, presidente del Bloque de Buenos Aires para Todos, en ocasión de la aprobación en segunda lectura del Proyecto para que la estación Entre Ríos del subte E, lleve el nombre de Rodolfo Walsh – 21/03/13
«Quiero dejar asentado el reconocimiento explícito a quien fuera la que puso en marcha el proceso de este proyecto, que es justamente Patricia Walsh, la hija de Rodolfo Walsh, que siendo diputada impulsó la disputa cultural, que es el planteamiento que venimos a realizar en el agregado del nombre de Rodolfo Walsh a la estación Entre Ríos del subte E.
Y digo que es una disputa cultural porque no es simplemente un tramite de carácter administrativo ponerle el nombre de quien para nosotros fuera un militante popular, un escritor y periodista, y fundamentalmente un compañero comprometido en su historia y en su desarrollo intelectual y político con los trabajadores.
Decía Rodolfo Walsh que las clases dominantes han procurado siempre que los trabajadores no tengan memoria, no tengan su propia historia, no tengan doctrina, no tengan héroes ni mártires. Cada lucha debe empezar de nuevo, las experiencias se ocultan, las lecciones se olvidan. Y así la historia pasa a ser propiedad de aquellos que son dueños de todas las cosas.
Esto es en síntesis, una lección de lo que es la historia argentina. Y cuando se pone en debate el nombre de una estación de subte, se está haciendo referencia a este concepto, a este fragmento de una vida de lucha y desarrollo intelectual.
Se está manifestando claramente la importancia que tiene poner el nombre de una calle como puede ser Germán Abdala, de poner a una calle o a una plaza Ernesto «Che» Guevara, de lo que significa trasladar el monumento a Roca y poner el de la Mujer Originaria.
Porque sin lugar a dudas la disputa cultural de los nombres de cada calle, los espacios públicos, las plazas, tiene que ver con nuestra historia y sin lugar a dudas en esta frase que hemos comentado de Rodolfo Walsh, abreva la capacidad que tiene el poder para ocultar las lecciones y obturar las posibilidades de que las calles tengan los nombres que se viven y que se sienten y que fueron producto de lo que se construyó en este país.
Rodolfo Walsh es producto de una historia de los sectores populares, que tuvo antecedentes concretos. Para que existiera la primera formación de la FORA en 1901, existió el 1er paro de los constructores de barcazas en Corrientes para impedir que vaya el Ejército Argentino a masacrar al Ejército Paraguayo.
Son historias que dejan en la cabeza, en las entrañas, en el corazón, la posibilidad de que se vayan trasmitiendo. Por eso es tan importante este homenaje que hoy le hacemos a Rodolfo Walsh».