«Esta Ley Nacional de Salud Mental es un instrumento normativo de referencia a nivel latinoamericano e internacional», sostuvo la diputada de Unidad Popular sobre la ley sancionada en 2010 que acaba de reglamentarse.
La diputada Graciela Iturraspe, del bloque Unidad Popular, celebró la reglamentación de la Ley Nacional de Salud Mental – Ley 26.657 – sancionada en 2010, fruto de décadas de lucha y compromiso de organizaciones de trabajadores, de usuarios y familiares, organismos de derechos humanos, referentes académicos, sanitaristas, artistas, y tantos otros actores sociales comprometidos con la salud mental como un derecho de todas las seres humanos.
«Esta Ley Nacional de Salud Mental es un instrumento normativo de referencia a nivel latinoamericano e internacional, constituye un punto de inflexión frente a la vulneración sistemática de los derechos humanos más esenciales de personas que atraviesan situaciones de padecimiento mental/discapacidad psicosocial, que sufren hasta hoy la estigmatización, segregación, exclusión, privación de libertad por situaciones que profundizan y cronifican su padecimiento como falta de vivienda, inserción laboral, apoyo a las familias, sostenimiento de lazos sociales, dispositivos ambulatorios de atención, entre tantos otros”, declaró la legisladora de UP.
En el mismo sentido, Iturraspe destacó: “La brutal represión en el Hospital Borda hace tan solo unas semanas, ha hecho visible una vez más la violencia institucional ejercida por la Policía Metropolitana de la Ciudad Autónoma de Buenos Aires sobre pacientes y trabajadores de dicha institución, tanto como la necesidad de transformar y sustituir progresivamente estas instituciones de confinamiento en pos de abordajes que fortalezcan la autonomía de las personas atravesadas por situaciones de padecimiento mental/discapacidad psicosocial y su inserción comunitaria con los sistemas de apoyo que requieran de acuerdo a la singularidad de cada persona”.
«Al mismo tiempo, seguimos trabajando por un sistema nacional de salud que se vea fortalecido financieramente, con condiciones dignas para todos los trabajadores de salud y transformado en su capacidad de cuidado, -finalizó la diputada- para que la implementación de esta ley, urgente y necesaria, sea viable e implementada en los tiempos que la población lo requiere”.
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