«Resulta claro que este gobierno está llevando a cabo acciones sobre el transporte ferroviario que apuntan a lo electoral pero que de ninguna manera solucionan los problemas estructurales», sostuvo la diputada de UP y vicepresidenta de la Comisión de Transporte.
La diputada nacional Liliana Parada, del bloque Unidad Popular, vicepresidenta de la Comisión de Transporte de la Cámara de Diputados dijo sobre las declaraciones del Ministro del Interior Florencio Randazzo, que se desprenden dos análisis inmediatos:
«En primer lugar, la crítica a los trabajadores ferroviarios es una clara continuidad con la política de transporte en estos últimos diez años, lo que lejos de ser una revolución, mantuvo los negocios entre amigos en detrimento de la seguridad y la calidad del servicio.
En este aspecto sigue sorprendiendo que un gobierno que se proclama como ‘nacional y popular’ demonice a los trabajadores mientras sigue defendiendo a Jaime y mantiene los negocios con Romero, Cirigliano, Roggio, etc.
Por otra parte, resulta imprescindible realizar una auditoría completa y exhaustiva del sistema ferroviario, donde las resoluciones de la Auditoría General de la Nación, que recomendaban rescindir los contratos hace años, sean tenidas en cuenta, para lo cual desde Unidad Popular hemos presentado el respectivo proyecto legislativo.
Resulta claro que este gobierno está llevando a cabo acciones sobre el transporte ferroviario que apuntan a lo electoral pero que de ninguna manera solucionan los problemas estructurales. Como remarcamos constantemente, con proyectos de ley y acciones públicas, es fundamental la puesta en funcionamiento de un Ente de Transporte Metropolitano. La política de transporte no puede seguir fragmentada entre los espasmos electoralistas del gobierno nacional con falaces nacionalizaciones, los falsos metrobuses del gobierno de la ciudad y el total desconcierto bonaerense.
Remarcamos que sin un debate amplio entre todos los sectores de la sociedad implicados acerca de las reales necesidades de un transporte ferroviario de cargas, un sistema interurbano de pasajeros y un sistema metropolitano, cada uno con sus lógicas diferentes, la compra de nuevo material rodante, el embellecimiento de estaciones y la colocación de pantallas, son paliativos en una herida que este gobierno no ha logrado o querido revertir».