“Luego de las PASO, se vive un cierre institucional de la gobernabilidad que se habia puesto en cuestión en 2001”. Afirmó el Diputado nacional Claudio Lozano en el Centro Cultural Borges. “La sucesión de 2015 – continuó el candidato a Senador de Camino Popular -, se ve asociada a la discusión de siempre: la interna del PJ y reconstrucción del radicalismo, con complicidad manifiesta de un progresismo posmoderno”, durante la presentación de «Subvertir la política», donde acompañó a su escritor Raúl Cardeiras, el viernes por la tarde.
En momentos de especulaciones partidarias, en el marco de campañas electorales con vestidos mediáticos, la salida de una publicación editorial reabre la reflexión teórica profunda e histórica. Cardeiras es titulado abogado, filósofo por condición y de profesión es escritor. Uno de sus mayores méritos es haber introducido la rica obra del filósofo francés Alain Badiou en Argentina.
“El problema no es el debate económico anticapitalista; es político: no hablar contra el sistema institucional a través del cual domina el capitalismo”, manifestó Cardeiras. “La política se estructura alrededor de dos variantes, la democracia y la dictadura, una con partido único, otra con pluralidad; pero, fundamentalmente, todos prescinden de la gente y los pueblos”. Esta reflexión introduce el sentido medular de la obra, que tiene un primer anticipo en su título: “La subversión pasa por cambiar de raíz el pensamiento político emancipatorio”.
El avance del neoliberalismo sobre América Latina, la mundialización capitalista, las luchas del pueblo Boliviano; el movimiento de los Sin Tierra, el Zapatismo, las experiencias piqueteras y la posterior explosión de 19 y 20 de Diciembre, hasta los indignados en Europa y el norte de África; sobre este recorte se estructura el análisis del «Subversión de la política».
“Estamos convencidos de que la representación es un problema, el esquema existente no resuelve nada”. afirmó Lozano. “Las ensayos políticos que, en algún momento fueron parte de los trayectos populares en Argentina, estan agotados y hay que buscar otra experiencia emancipadora”.
Claudio Lozano se expresó desde el espacio que él ocupa y dirige y que, dijo, entiende el partido como un espacio de contribución y de aporte a la legalidad en construcción de la organización social y popular. “Desde ahí formamos un concepto institucional que llamamos Constituyente Social y que es una suerte de autoconvocatoria permanente de múltiples experiencias populares para debatir un camino de formación de otra propuesta política en nuestro pais”.
Desde el lugar de partícipe de las luchas populares durante la década del 90, el candidato de Camino Popular, desplegó una revisión histórica de la Argentina política reciente. Primero, las categorizó como facilitadoras de las condiciones para que se produzcan los movimientos de 2001. “Aquel fue el verdadero final de la dictadura y es el punto de referencia de construcción política”. “En ese momento – continuó Lozano – pudimos, como sociedad, desplazar la consigna de < como evitar lo peor >, que disciplinó el comportamiento político dominante y estuvo arraigada en el impacto que produjo el genocidio y en el modo de someter los comportamientos mediante el horror”.