En la Ciudad de Buenos Aires, casi un millón de personas tiene relaciones conflictivas con la vivienda y aproximadamente medio millón, vive en marginalidad habitacional. “Camino Popular propone soluciones concretas como la creación de un fondo nacional que garantice la inversión real en materia de vivienda, y las sostiene acompañando a las organizaciones sociales, que son capaces de construir vivienda autogestionada a un 40% del valor del mercado», sostuvo el diputado nacional Claudio Lozano, candidato a Senador por CABA de Camino Popular.
Los candidatos del frente, Lozano, Itai Hagman, Fabio Basteiro, Liliana Parada y la actual legisladora Laura García Tuñón, entre otros, dialogaron y compartieron ayer por la tarde con vecinos, inquilinos, cooperativas y organizaciones territoriales en el barrio de Constitución. El encuentro “El Derecho de la Ciudad” convocó en Plaza Garay y propuso una radio abierta, actividades, comidas, recreación y debate sobre distintas temáticas de la ciudad. La problemática de vivienda y hábitat fue el titular más caliente y los candidatos expusieron sus propuestas.
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Itai Hagman, mayor representante del movimiento universitario, dirigente de Marea Popular y primer candidato de Camino Popular a Diputado nacional señaló que «existe un desarrollo de renta urbana que se llevan un puñado de empresas como pasa con la extracción minera, petrolera e hidrocarburífera en cada provincia» y agregó: «no es sólo un problema de la ciudad, discutirlo implica debatir el modelo de país».
El actual legislador porteño y candidato a renovar su banca, Fabio Basteiro mostró su posición respecto a que las organizaciones populares tienen la capacidad de generar respuestas al déficit en el hábitat y que existen leyes que “hemos sancionado en la legislatura para la urbanización e integración de las villas pero no se cumplen”. Además, Basteiro explicó que «la política de distritos del macrismo no genera nuevos empleos, sino evasión fiscal para grandes empresas y sobrevaloración del suelo para la especulación, generando aumentos en los alquileres, imposibilitando el acceso a vivienda y provocando una política expulsiva de los sectores con menos recursos».