Por primera vez, la Cámara Nacional Electoral entregó materiales traducidos al quechua, mapuche, mocoví, qom y pilagá en cinco provincias.
(Página/12) Habitantes de las provincias de Formosa, Chaco, Santa Fe, Buenos Aires y Capital Federal vivieron ayer su primera experiencia electoral bilingüe con la entrega de materiales traducidos por la Cámara Nacional Electoral en lenguas como el quechua, mapuche, mocoví, qom y pilagá. La medida, que tiene como objetivo una mayor integración de los pueblos originarios en los comicios, “fue un éxito” y “la palabra que más le cabe es genial”, reivindicó Juan Namuncurá, integrante del Consejo Nacional de Políticas Indígenas.
La experiencia piloto se concretó ayer en Formosa, Chaco, Santa Fe, Buenos Aires y Capital Federal, pero en 2015 sería “transversalizada a todo el país”, dijo el dirigente, al cierre de los comicios.
La iniciativa permitió que en las mesas de votación hubiera instructivos a disposición de los integrantes de las comunidades. Los materiales, elaborados por la Cámara Nacional Electoral, se podían consultar en algunas de las mesas en esas jurisdicciones, y fueron traducidos al quechua, mapuche, mocoví, qom y pilagá.
Para el funcionario y bisnieto del beato Ceferino Namuncurá, “es un avance enorme para los pueblos y comunidades originarias poder salir de la marginación que le plantea el sistema electoral al desconocer la lengua que se habla en el lugar”.
“Tuvimos mucha participación mapuche, qom, mocoví, de las comunidades del interior, estamos felices”, dijo Namuncurá, quien aseguró que el proceso de ayer “superó todas las expectativas”.
Para Israel Alegre, dirigente de la comunidad Nam Qom y miembro del CNPI, la experiencia “funcionó muy bien. Los hermanos fiscales y autoridades de mesa hablaron en idioma indígena. De esta forma, se inició un avance muy importante para los pueblos originarios, que esperamos se implemente en más distritos para el 2015”.
La diputada provincial y originaria Rita Liempe (Unidad Popular – Buenos Aires) también remarcó su satisfacción frente a la iniciativa, porque “es la primera vez en la historia que vemos a nuestros hermanos participar de elecciones en los idiomas originarios. Se trata de un avance fundamental en materia de derechos humanos”.
“Fue un trabajo en conjunto con el Consejo Nacional de Políticas Indígenas y la Cámara Nacional Electoral. Se hizo una prueba piloto. No pudimos concretarlo en más provincias por la cercanía de las elecciones. Mañana (por hoy) veremos los resultados”, agregó.
Liempe explicó las dificultades que implica votar para estas comunidades. “Los pueblos indígenas votaron siempre en la lengua de la mayoría, que nunca ha tenido en cuenta las lenguas nativas. De esta forma, se dificulta la participación plena en el campo político que es fundamental. Se les ha negado acceder. Es lo mismo que nosotros tuviéramos los instructivos, los programas de gobierno y las campañas en wichí. Tendríamos que encontrar a alguien para que nos tradujera. Se dificulta ejercer plenamente el derecho a participar.”
En esta sentido, recordó el convenio 169 de la Organización Internacional del Trabajo (OIT), que trata específicamente los derechos de los pueblos indígenas y tribales. “El convenio 169 de la OIT dice que las comunidades deben tener plena información para su participación política. Al no traducirse la información, no saben cómo armar un partido político y ven reducido su voto. Hay un proyecto con el Consejo Nacional de Políticas Indígenas y la Cámara Nacional Electoral para traducir la Constitución Nacional y darle un carácter más amplio al derecho al acceso de la información”.
La traducción contemplaba un instructivo para las autoridades de mesa e información básica que explicaba el porqué del cuarto oscuro, cómo tenía que ser el corte de boleta, qué es un voto en blanco o impugnado y las facultades de las autoridades.
La iniciativa permitió que en las mesas de votación hubiera instructivos a disposición de los integrantes de las comunidades. Los materiales, elaborados por la Cámara Nacional Electoral, se podían consultar en algunas de las mesas en esas jurisdicciones, y fueron traducidos al quechua, mapuche, mocoví, qom y pilagá.
Para el funcionario y bisnieto del beato Ceferino Namuncurá, “es un avance enorme para los pueblos y comunidades originarias poder salir de la marginación que le plantea el sistema electoral al desconocer la lengua que se habla en el lugar”.
“Tuvimos mucha participación mapuche, qom, mocoví, de las comunidades del interior, estamos felices”, dijo Namuncurá, quien aseguró que el proceso de ayer “superó todas las expectativas”.
Para Israel Alegre, dirigente de la comunidad Nam Qom y miembro del CNPI, la experiencia “funcionó muy bien. Los hermanos fiscales y autoridades de mesa hablaron en idioma indígena. De esta forma, se inició un avance muy importante para los pueblos originarios, que esperamos se implemente en más distritos para el 2015”.
La diputada provincial y originaria Rita Liempe (Unidad Popular – Buenos Aires) también remarcó su satisfacción frente a la iniciativa, porque “es la primera vez en la historia que vemos a nuestros hermanos participar de elecciones en los idiomas originarios. Se trata de un avance fundamental en materia de derechos humanos”.
“Fue un trabajo en conjunto con el Consejo Nacional de Políticas Indígenas y la Cámara Nacional Electoral. Se hizo una prueba piloto. No pudimos concretarlo en más provincias por la cercanía de las elecciones. Mañana (por hoy) veremos los resultados”, agregó.
Liempe explicó las dificultades que implica votar para estas comunidades. “Los pueblos indígenas votaron siempre en la lengua de la mayoría, que nunca ha tenido en cuenta las lenguas nativas. De esta forma, se dificulta la participación plena en el campo político que es fundamental. Se les ha negado acceder. Es lo mismo que nosotros tuviéramos los instructivos, los programas de gobierno y las campañas en wichí. Tendríamos que encontrar a alguien para que nos tradujera. Se dificulta ejercer plenamente el derecho a participar.”
En esta sentido, recordó el convenio 169 de la Organización Internacional del Trabajo (OIT), que trata específicamente los derechos de los pueblos indígenas y tribales. “El convenio 169 de la OIT dice que las comunidades deben tener plena información para su participación política. Al no traducirse la información, no saben cómo armar un partido político y ven reducido su voto. Hay un proyecto con el Consejo Nacional de Políticas Indígenas y la Cámara Nacional Electoral para traducir la Constitución Nacional y darle un carácter más amplio al derecho al acceso de la información”.
La traducción contemplaba un instructivo para las autoridades de mesa e información básica que explicaba el porqué del cuarto oscuro, cómo tenía que ser el corte de boleta, qué es un voto en blanco o impugnado y las facultades de las autoridades.