Hugo “Cachorro” Godoy, presidente de Unidad Popular bonaerense junto a Carlos Martínez, director de “Condenados”, película que retrata los resistencia de los presos políticos en la U9 de La Plata durante la dictadura cívico-militar, explicaron la difusión del film al que ya accedieron más de 6 mil alumnos de la secundaria.
Presentes en la radio FM Cielo de la ciudad de La Plata, tanto Godoy como Martínez – detenidos en dicha cárcel – detallaron el convenio realizado entre ATE y DGE para que alumnos de escuelas públicas y privadas tengan la posibilidad de ver la película de manera gratuita y la repercusión de la misma.
“Lo que pasó en la Unidad 9 de La Plata afectó a la ciudad pero fue un lugar de concentración de presos de todo el país, un lugar de clasificación y exterminio concebido como estrategia nacional”, señaló Carlos Martínez, director de “Condenados”.
Por su parte, “Cachorro” Godoy, encargado de que el film se viera en las escuelas, señaló que “entendimos que la película tenía un valor para los trabajadores pero fundamentalmente para las nuevas generaciones por lo que le propusimos a la Dirección General de Escuelas de la Provincia un convenio para hacer accesible la película a los pibes de 4to, 5to y 6to año del secundario. Hace un mes que se empezó a proyectar y ya la han visto alrededor de 6200 alumnos. La idea es recorrer la Provincia con la intención que la vean la mayor cantidad de pibes”.
“Estaba el pabellón 1 designado a los dirigentes de Montoneros y el Pabellón 2 destinado al PRT- ERP, a mi me tocó el pabellón 2 y está reflejado en la película porque resume los distintos métodos que utilizó la represión, la desaparición y los fusilamientos, y algo que no estaba contado y necesitábamos dar cuenta que fue el secuestro de los familiares de los militantes, que no era militantes sino madres, padres, esposas, hermanos”, explicó Martínez.
En ese marco, relató que “a los que los habían fusilado le respetaron las familias, los que seguimos con vida era como que nos decían, ´por ahora seguis vivo pero no te dejamos a nadie´. En esto hay una diferencia moral porque muchos de los detenidos éramos guerrilleros y ya libres podíamos haber tomado venganza pero no hubo un solo intento y nos era fácil porque sabíamos hasta quiénes habían dado las órdenes. De esos pabellones tenemos 17 familiares desaparecidos”.
Cachorro
Durante la entrevista, ante la consulta por su apodo, el dirigente de Unidad Popular explicó que “podemos decir que Cachorro es un seudónimo carcelario porque nació en la cárcel. Yo fui detenido en agosto de 1975 y en ese momento sólo había dos pabellones y yo era el más joven de los presos. Uno de los compañeros era el “Barba” Gutiérrez, actual intendente de Quilmes que me mencionaba así. Después nos cambiaron de pabellones y dejamos de vernos por lo tanto el seudónimo fue solo por un momento. Cuando salgo en libertad en 1982, ese mismo día se inaugura en La Plata el primer Ateneo Eva Perón y esa noche se hizo una peña, nos reencontramos con el Barba que había quedado en libertad hacía un tiempo y me saludó diciéndome Cachorro y me bautizó para siempre”.
Volviendo al film, Godoy sostuvo que “la película tiene la posibilidad de retratar una faceta que es la resistencia que está oculta, de hecho las cárceles están ocultas en la sociedad, por eso la película muestra la resistencia dentro y fuera de la cárcel, la posibilidad de trascender los muros. De los 30 asesinados y desaparecidos, 17 eran familiares, más que los presos, lo que demuestra que la dictadura atacaba a la globalidad del pueblo argentino no solamente a un grupo selecto de militantes”.
“Estamos logrando el objetivo que es llegar con esta historia a la sociedad, a los que no estaban enterados e incluso a los que no estaban interesados”, puntualizó el director, quien explicó que “no es un documental es una película donde los hechos suceden con actores, eso facilita el contacto por lo que los estudiantes quedan atrapados con la historia. Al terminar la película hay una enorme emoción que ellos lo expresan con aplausos pero en los debates posteriores se repiten la comprensión y el compromiso porque llegan a conocer un poquito a esas personas que murieron. Eso hace que esta experiencia no va a ser olvidada”.
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