Lozano explica cómo el falso debate «regulación vs. autoritarismo» oculta el verdadero: democratizar las cadenas de valor para regular el mercado.
Por Claudio Lozano*
(Ámbito Financiero) El debate sobre los contenidos del proyecto de Ley de Abastecimiento presentado por el Gobierno, quedó entrampado en la falsa antinomia «regulación vs. autoritarismo» ocultando, de este modo, el necesario debate sobre «democratización y desarrollo».
Un debate que, sometiendo la regulación del capital concentrado a ámbitos de negociación que involucren a la multiplicidad de actores de cada cadena de valor, permitiría evitar el autoritarismo y la discrecionalidad a la hora de implementar las políticas sobre la materia. Un ejemplo de esto es el caso de la gestión de los cupos de importación, pero que termina siendo aprovechado por el sector empresario como excusa ante cualquier medida que suponga reducir mínimamente sus privilegios.
El primer paso para sortear los problemas de escasez y precios elevados que actualmente se observan en la coyuntura productiva, es la puesta en marcha de mesas de concertación democráticas. Una discusión que involucre al conjunto de los actores, permitirá tanto, democratizar y disciplinar el comportamiento empresario, al tiempo que sostener la ampliación de la producción e inclusive la reducción de los precios, sobre la base de reducir las rentabilidades monopólicas y oligopólicas de un conjunto reducido de firmas que operan en cada cadena de valor.
PASO PREVIO
La «democratización» de las cadenas de valor adopta el carácter de «paso previo» para encarar una estrategia de desarrollo profunda.
Resulta indispensable, a la hora de llevar adelante esta estrategia de desarrollo, entender que hay determinadas cadenas de valor que detentan ventajas comparativas respecto de otras. Así, las producciones asentadas en nuestros recursos naturales, como las agroindustrias o el complejo minero e hidrocarburífero, deben financiar el desarrollo de las producciones vinculadas con la satisfacción de las necesidades de los argentinos.
Esta tarea, que al parecer sería hoy imposible de realizar, no lo sería tanto de la mano de una democratización profunda de las cadenas de valor que en lo inmediato permitirían pensar su implementación en el corto plazo.
(*) Presidente bloque Unidad Popular