Colectivo Porteño – Todavía nos conmociona la muerte de Ismael Sosa, ocurrida en Córdoba durante un recital de La Renga a manos de la policía. Para conocer más detalles sobre este triste hecho, mantuvimos una conversación telefónica con Matías Calderón, de la Coordinadora Antirrepresiva directamente desde esa provincia. Nos visitó parte de la junta interna de ATE INDEC, que nos hizo un balance los 8 años de la intervención en el organismo estatal. Además escuchamos algunos testimonios obtenidos en la marcha convocada por la CTA Autónoma el pasado miércoles 4 de febrero. Y, musicalmente, homenajeamos algunos pibes asesinados por la policía en un recital.
Ismael Sosa, otro muerto en un recital de rock a manos de la policía
Abordamos la muerte del fanático de La Renga que nunca volvió a su casa. Para eso, hablamos vía telefónica con Matías Calderón, de la Coordinadora Antirrepresiva de Córdoba. Nos contó que lo que pasó con Ismael es lo que ocurre habitualmente con los jóvenes en la provincia de Córdoba: “fue víctima de la represión del Estado y de sus políticas en esta materia. En esta provincia la triste y grave situación, es que más los jóvenes de los sectores populares y de los estratos más desplazados de la sociedad, somos víctimas permanentemente del acoso, persecución y de la represión policial, ya sea mediante el código de faltas que establece estrategias de represión preventiva, así como también mediante la represión selectiva, que se establece cuando se producen distintas protestas sociales y manifestaciones, o por ejemplo, recitales y eventos a los que acudimos los de los estratos más desfavorecidos. Ismael asistió a un recital de La Renga el 24 de enero pasado, en Villa Rumipal. El concierto fue convocado y organizado por José Palazzo, que es uno de los empresarios de rock más conocidos no solamente en Córdoba sino también en toda la Argentina, es, por ejemplo, el organizador del Cosquín Rock. Cuando pasó todo, a Ismael intentan hacerle un cacheo, intentan detenerlo, no se sabe muy bien cuales son las circunstancias por las cuales intentan hacerlo, pero lo cierto es que él logra zafarse de esa intentona policial de reprimirlo, y durante un tiempo se establece una búsqueda, un rastrillaje por parte de la policía hasta que lo encuentran. Sabemos esto porque a Ismael lo han visto en determinados lugares de Villa Rumipal pidiendo colaboración y ayuda porque, en primer lugar, no sabía bien donde se encontraba, pero además porque sabía que la Policía había intentado arrestarlo y reprimirlo”.
Calderón explicó que “poco después lo detienen y después no se supo más nada de Ismael hasta que nos enteramos de que apareció ahogado en el lago. Ahora la fiscalía intenta decir que Ismael estaba drogado y que por lo tanto se ahogó solo. Esta es la estrategia de defensa de la Policía y del mismísimo gobernador”. Sobre la cantidad (y calidad) de efectivos presentes en el concierto cordobés, Calderón refirió que “nosotros en Córdoba registramos una presencia policial muy fuerte, muy contundente no sólo en los recitales sino también en los bailes de cuarteto y en los salones donde se baila más la cumbia, no así en los boliches o en los pubs de la ciudad o del interior. También notamos que esta presencia policial tiene un modus operandi, que es el de la razzia. No están ahí para observar y ver como transcurren las cosas sino que hacen cacheos desde el primer control policial. Uno tiene que pasar por varios de estos procedimientos policiales, averiguación de antecedentes sin ningún motivo, y finalmente persiguen, arrestan, golpean como quieren en cualquiera de los lugares. Para nosotros de ninguna manera hace falta todo esto. Desde la Coordinadora Antirrepresiva por los Derechos Humanos y el ENA entendemos que la Policía tiene que salir ya mismo de los locales bailables de cuarteto y principalmente de los recitales por los graves antecedentes que existen tanto en los distintos lugares del país como en Capital Federal. Además, hay antecedentes de mega recitales sin presencia policial. El Indio Solari, por ejemplo, tuvo que sacar a la Policía de sus recitales por el antecedente del asesinato de Walter Bulacio y tiene un procedimiento privado de seguridad, con el cual tampoco se puede acordar pero que demuestra que la presencia policial no garantiza nada y que encima es un estorbo, porque ya vimos las consecuencias de lo ocurrido con Bulacio.
La semana pasada un grupo de autoconvocados y organizaciones sociales, políticas, estudiantiles y gremiales llamaron a una concentración frente a un Shopping (que antes era una escuela, punto obligado de encuentro para manifestaciones masivas) para repudiar el asesinato de Ismael, señalar la responsabilidad que le cabe al gobierno de Córdoba, al empresario José Palazzo, a la cúpula de la policía provincial y a los efectivos que participaron en ese procedimiento. Se recolectaron, además, numerosas adhesiones que se le van a entregar a los familiares de Ismael y se leyó un documento escrito por su familia en el que se pide el esclarecimiento de su asesinato y exigió, además, que se terminen estos casos de violencia policial y gatillo fácil. Calderón dijo que “a pesar de haber sido convocada sobre la hora, la concurrencia fue muy importante. Estuvimos 3 horas repudiando el asesinato y luego se marchó por las calles de la capital cordobesa para dar a entender que cada vez que se fusile a un pibe, cada vez que torturen a alguien y nos sigan encerrando, les vamos a seguir cortando las calles de esta ciudad porque entendemos que por medio de la Justicia, de este tipo de Justicia, no va a venir ningún tipo de solución importante. Es más, ya estamos viendo como están tratando de desviar el foco de atención y que esto pase como un “autosuicidio”, algo incomprensible, pero esperamos que la presión popular y las marchas obliguen a la Justicia a que haga las cosas como corresponde”.
La cifra de los pibes asesinados por el Estado represor argentino en Democracia, desde 1983, asciende a 4321. El 51% de ellos, menores de 25 años. Todo dicho.
Marcha por el esclarecimiento del atentado a la AMIA , la muerte del fiscal Nisman y la apertura de los archivos de la ex SIDE
El 4 de febrero, centenares de argentinos se convocaron frente al Congreso Nacional y marcharon por Avenida de Mayo hasta Plaza de Mayo para pedir que se esclarezca todo lo referente a la voladura de la AMIA. Allí hablamos con el diputado por UP y candidato a Presidente de la Nación, Víctor De Gennaro, quien dijo que «más allá de la conmoción que significa asistir a una muerte que la mayoría de las personas piensan que es un asesinato y que la mayor parte de la comunidad argentina piensa que no se va a encontrar a los culpables, o sea, que hay un manto de oscuridad, lo que es cierto es que salimos a la calle con todas las organizaciones convocadas por la CTA y APEMIA a expresar que nosotros no vamos a admitir la impunidad como mecanismo permanente y constante. No lo permitimos con los crímenes de lesa humanidad, tampoco en el caso de la AMIA y mucho menos en este caso. Por eso hay que encontrar los mecanismos de solución, por eso, hemos presentado en el Congreso a pedido de los familiares de APEMIA, un proyecto de ley que plantea es formar una comisión bicameral con participación de distintos sectores de la Comunidad que acceda a los archivos clasificados, que hay que abrirlos, y que, a partir de ahí, se establezcan los medios para discutir a fondo la investigación”.
Entre los presentes también estuvo el Premio Nobel de la Paz Adolfo Pérez Esquivel, que nos dejó también importantes precisiones: “el caso de la AMIA no es que afecta a una colectividad. Afecta al pueblo. Sobre la impunidad es imposible construir una democracia. Entonces, estamos reclamando y exigiendo que los senadores y diputados –sobre todo los oficialistas- se bajen de la obediencia debida y que actúen con responsabilidad histórica. Porque esto nos está afectando a todos”.
Laura Ginsberg, de APEMIA, fue una de las personas que encabezó la marcha. Conocida por su militancia y compromiso por el esclarecimiento del atentado de la AMIA en el que perdió a su marido, explicó que “lo que nos convoca, en primer lugar, es una grave crisis política e institucional, desatada por la muerte del fiscal Nisman, y que está indisolublemente ligada a la falta de esclarecimiento, verdad y justicia del crimen de la AMIA, y el papel que han jugado –y siguen- los servicios de inteligencia en la concreción de estos crímenes y en su encubrimiento en nuestro país. Estamos aquí para manifestarnos en contra de esta impunidad, para exigir el esclarecimiento de la muerte del fiscal Nisman y de la masacre de la AMIA, para lo cual es indispensable abrir los archivos que el Gobierno sigue manteniendo ocultos y conformar una comisión investigadora independiente, ya que en manos de esta gente no se puede esclarecer ningún crimen. Y menos el de Nisman, que es un crimen político. Y aunque digan que lo esclarecieron, la conciencia popular tiene en claro que no se les puede creer y que es un caso de impunidad. ¿Se puede esclarecer? Sí que se puede, pero no en manos de esta gente. La necesidad de conformar esta comisión que nosotros proponemos y que hemos puesto por escrito en un proyecto de ley, con la apertura inmediata de los archivos, es un camino que nunca se transitó, y es el que nos puede permitir acercarnos a conocer la verdad y exigir justicia, pero no en manos de esta gente. En las nuestras”.
Finalmente habló a todos los presentes Pablo Micheli, secretario general de la CTA Autónoma Nacional. Expresó que “nuestro pueblo sabe que la verdad y la justicia las tiene que conseguir con lucha. No cruzado de brazos esperando. Por eso, compañeras y compañeros, el compromiso de esta Central no es sólo estar hoy en este acto sino demostrar también que una Central de Trabajadores va a pelear contra el impuesto a las ganancias, por salario mínimo vital y móvil que sea digno para una familia tipo superior a los 10 mil pesos por mes. Por pelear por un aumento salarial para los jubilados, por pelear por el 82% móvil, también vamos a pelear por verdad y justicia por estas cosas. Por Nisman, que se esclarezca lo que pasó, pero también por Julio López, por Luciano Arruga y por todos los que han pagado con su vida el haber levantado la voz en esta democracia. No vamos a aceptar quedarnos cruzados de brazos. Pelear para que se derogue definitivamente, y la Presidenta, si realmente quisiera tener un gesto tendiente a cambiar esta situación de que haya servicios que nos vigilan a los que luchamos, lo mínimo que debería haber hecho es derogar inmediatamente la Ley Antiterrorista, no seguir sosteniendo esa barbaridad en democracia. Esto es lo que queremos afirmar desde nuestra Central”.
La situación de la intervención gubernamental en el INDEC
Hace 8 años que el Instituto Nacional de Estadísticas y Censos está sufriendo –nunca mejor dicho- una intervención por parte del gobierno Kirchnerista. Para hacer un balance de esta gestión y saber cual es el estado de las cosas en el organismo estatal, nos visitaron en el piso miembros de la junta interna de ATE INDEC, Rosa Gemini y Luciano Belforte, quien puntualizó que “esta intervención provocó la destrucción absoluta del sistema estadístico argentino, que siempre hay que recordar que es el más viejo de América Latina y uno de los más antiguos del mundo. La Dirección de Estadística de la provincia de Buenos Aires se fundó cuando el gobernador era Martín Rodríguez. O sea, acá se hicieron estadísticas de la época de la Colonia. La Presidenta, que siempre dice que admira a Belgrano, tendría que recordar que él trabajo para el primer censo que se hizo en la Colonia. Belgrano se debe estar revolcando en la tumba con las palabras de la Presidenta. O sea, fue una destrucción completa no sólo del sistema de estadísticas sino también de las condiciones laborales de los que trabajamos en el INDEC, y fue una destrucción para la economía del país en varios sentidos. Hay que recordar que gracias a esta estafa el Estado ha pagado muchísima más plata para los bonos que se indexan con el PBI, que casualmente varios de los funcionarios son dueños de esos bonos”.
Gemini, por su parte, afirmó que “los 8 años de manipulación de las estadísticas nos dejan sin una brújula, porque lo que se ha destruido es irrecuperable. Y con las nuevas autoridades, no cambió nada”. Belforte expresó que “por un lado, me alegro de que ese personaje nefasto para la administración pública que es Ana María Edwin se haya ido del INDEC, pero se fue como premiada INAP, el Instituto Nacional de Administración Pública. Ese personaje ahora es quien dirige los concursos para ser empleado público. Y pusieron a Norberto Itzcovich, que fue el ladero de Edwin, o sea, el che pibe de ella, que ahora es el que está a cargo del INDEC, pero desde el punto de vista tanto de la parte profesional, de los insumos que produce el INDEC o desde el punto de vista laboral, nada ha cambiado. Es un maquillaje más, como siempre”.
Según Gemini, “de la misma manera se intentaron otros maquillajes, como por ejemplo, lanzar con bombos y platillos el Índice de Precios Nacional Urbano, con la intervención del Fondo Monetario Internacional y cuyos datos realmente no soportan la realidad porque también están totalmente maquillados. Son intentos de darle un cariz de mejora o de calidad técnica que en la realidad no existe”.
En un año electoral, se impone también hablar del tema, de que puede llegar a ocurrir con el cambio de gobierno y que influencia puede tener esta intervención del INDEC en el acto eleccionario. Gemini comentó que “nosotros creemos que estos 8 años tienen un final abierto todavía, porque, de lo que nosotros conocemos, los candidatos presidenciables que se presentan a las próximas elecciones, no se han expedido claramente respecto de que INDEC quieren, y si van a garantizar de alguna manera que se tenga en cuenta la opinión de los trabajadores que hemos soportado despidos, jubilaciones compulsivas, represión, juicios –incluso en el caso de Luciano, que ha tenido muchos juicios- entonces todavía abrimos un paréntesis respecto de cual es el futuro del Instituto”. Con respecto a esto, Belforte agregó que “justamente, deberían expedirse sobre que es lo que quieren hacer en el INDEC. Yo no le pongo muchas expectativas a personas que fueron parte del gobierno, como (Sergio) Massa, que ahora parece que descubre que el Kirchnerismo es lo que es, y cuando él era parte, no. O como (Mauricio) Macri, que desde el punto de vista laboral maltrata a los trabajadores de la Dirección de Estadística de la Ciudad igual que a los del INDEC. De hecho, estamos pidiendo por la reincorporación de trabajadores que ha despedido a fin de año. No se diferencian demasiado. Todo esto depende de la pelea que demos los trabajadores, los del INDEC, acompañados por el conjunto de la Sociedad”.
Ambos delegados explicaron que están convocando a toda la comunidad para que apoye su lucha a través de las redes sociales: “consiste en sacarse una foto con un cartel que dice “#El13FYoAbrazoALIndec” como hashtag. Los que manejan Twitter también lo pueden enviar, si quieren junto a un comentario. Se puede bajar el cartelito directamente del Facebook de la Junta Interna del INDEC, se sacan una foto y la mandan a nuestro mail, que es inateindec@gmail.com, y nosotros lo vamos a subir a nuestro Facebook”.
El viernes 14 a las 13 los trabajadores del INDEC convocan a un abrazo al Instituto, sito en la esquina de Perú y Avenida Roca: “queremos hacer un gran acto – adelantó Belforte– para conmemorar 8 años de intervención. E peremos que sea el último acto anual, pero nunca se sabe”. También relataron como pasaron de ser técnicos estadísticos y estar en medio de números todo el tiempo a llevar a cabo una lucha que sigue siendo emblemática para todos los organismos estatales y trabajadores como los de Lear: “en realidad, fuimos empujados porque querían que le vendiéramos gato por liebre al pueblo argentino. Muchos cerraron la boca y pasaron por la ventanilla a cobrar y otros dijimos que no, que no estábamos a la venta. Yo quiero hacer mi trabajo razonablemente bien porque tampoco somos mártires de la lucha de nada. Somos trabajadores, queríamos hacer bien nuestro trabajo. Nada más”. “Además de eso, lo que defendíamos era la fuente de trabajo –comentó Rosa Gemini- porque la destrucción de la confianza en las estadísticas lo que hizo fue destruir al Instituto. Por lo tanto, quedamos desplazados, sin actividad, cada uno en su área, Luciano en la de Informática, yo en la de Difusión, y fuimos empujados a defender esos puestos que eran nuestras fuentes de trabajo y porque creíamos que lo que hacíamos era muy importante como servicio público. El deber ser del Instituto. Sin estadísticas, no hay forma de conducir políticas sociales y económicas que realmente palien los problemas de la población. Es cierto que, si bien éramos afiliados al gremio, encontramos un lugar desde donde juntarnos y luchar por lo que creíamos, que era nuestro lugar en el Instituto”. “Esto no es ninguna abstracción –afirmó Belforte– porque el hecho de falsificar el número de la inflación hace que, por ejemplo, los salarios de los jubilados que se ajustan por la inflación, se ajusten por debajo de sus niveles verdaderos. Nuestra pelea es para que ese número sea el real, para que los trabajadores puedan pelear por un aumento real. Para que se conozca cual es la verdadera cantidad de pobres y que los organismos que se ocupan del tema sepan que hacer para paliar ese problema. Si nosotros agarramos el dato oficial que nos da la mentira del INDEC y nos dice que en la Argentina se acabó la indigencia, bueno, no hay planes para paliar la indigencia. Creo que lo que estamos haciendo en última instancia influye directamente en la vida de todos los trabajadores de nuestro país. Nuestro motivo original para salir a la lucha fue este. Defender la fuente de información que es un derecho humano y saber la verdad de lo que ocurre en nuestro país. también se mezcla con lo laboral nuestro, porque fuimos desplazados y nos bajaron el sueldo”. “Hace dos días, el INDEC acaba de sacar el índice de salarios –aclaró Gemini– y según la estadística que publica, el aumento salarial anual entre diciembre de 2013 y diciembre de 2014 fue del 31%. Como miente con la inflación y dice que la anual fue del 24%, esto le permitiría decir al INDEC que tenemos un incremento del poder adquisitivo de los salarios anual del más del 5 ó 6%, con lo cual, vemos una vez más cual es el efecto dominó de mentir en un indicador que arrastra a todo el resto a demostrar cualquier tipo de cifras”.