Ante un auditorio colmado de estudiantes universitarios, Claudio Lozano, precandidato a Jefe de Gobierno, Itai Hagman, precandidato a primer legislador y Patricia Walshexpusieron sus visiones sobre el estado actual de la ciudad y las propuestas que el Frente Camino Popular tiene para hacer que esta sea una ciudad para vivir, disfrutar y que no sea sólo un lugar en el que el sistema de negocios sea quien manda que se hace en materia de vivienda, espacios públicos, recolección de residuos, educación mientras que los ciudadanos de a pie quedan convertidos en convidados de piedra.
Itai Hagman hizo un poco de historia y recordó el camino recorrido desde los inicios de su organización política hasta este presente que lo tiene encabezando la lista de candidatos a legisladores por Camino Popular:“la verdad es que siempre de alguna manera, uno tuvo que ganarse el derecho a existir y sufrir la subestimación de su alrededor. Digo esto porque cuando, en su momento, armamos la agrupación, nadie imaginaba que podíamos crecer de la manera que lo hicimos, ganar centros de estudiantes, llegar a conducir la FUBA. Cuando nos decidimos a conformar una fuerza política –y todos los que están acá sabe lo difícil que es hacerlo- con extensión territorial en la ciudad de Buenos Aires, dar un paso y construir con otras agrupaciones una fuerza política nacional, nadie daba un mango por nosotros. Y cuando dijimos que había que ir a elecciones -que para algunas de nuestras organizaciones era toda una herejía- porque era posible también dar una disputa en el terreno electoral, y que era posible, por ejemplo, aspirar a ocupar lugares institucionales para darle más fuerza a la militancia popular que alimentamos todos los días, también, seguramente, muchos no pensaron que íbamos a ser capaces de hacerlo”.
Hagman sostuvo que “lo que está en juego en estas elecciones es demostrar contra todos los pronósticos, los que nos miran y nos dicen “estos pibes muy lindas intenciones pero nunca van a llegar a nada”, contra todos los que auguran permanentemente el fracaso de nuestros proyectos de nuestra política, que si hemos llegado hasta acá es porque efectivamente creemos y estamos convencidos de que es posible lograr conquistar lugares y es por eso que el próximo 26 de abril y el 5 de julio nuestra organización Camino Popular se va a instalar como uno de los espacios políticos de la ciudad de Buenos Aires, así como hemos dado todos esos pasos y nos hemos demostrado a nosotros mismos de que se puede, que nadie nos regaló nada, que hemos hecho todo esto a pura voluntad, a puro pulmón militante. Creo que con esa fuerza le vamos a demostrar a muchos que dicen “¿para qué votar a Camino Popular si nunca van a poder gobernar ni ser una opción real?”. Les vamos a poder demostrar que así como hemos llegado hasta acá sin que nadie nos regale nada y sin que nadie confíe en que éramos capaces, Camino Popular puede ser y construir una alternativa de gobierno en la ciudad de Buenos Aires. Ése es nuestro desafío principal. Nosotros no queremos ser solamente una fuerza de denuncia sino una de mayorías y por eso construimos este frente”.
Claudio Lozano, por su parte, hizo un diagnóstico pormenorizado de la situación porteña: “el sistema político dominante de la ciudad es aquel que permite reproducir el sistema de negocios. La conducción la tiene el Macrismo y tiene como socios funcionales al Frente Para La Victoria y el ECO. Por eso es tan importante parar una propuesta política distinta. Es muy simpático escuchar en esta campaña a algunos: lo de Lousteau es casi ya rayano en la locura. Este muchacho, que parece que cualquier colectivo le viene bien, primero se subió al carro del gobierno nacional, fue ministro. Es más, lo fue en un momento crítico como fue la Resolución 125. Ahora está en realidad con todos los que quieren eliminar las retenciones y estaban en contra de la 125, y además, encabeza una lista que dice que quiere reemplazar a Macri, y los que van con él lo proponen como candidato a Presidente de la Nación. El nivel de absurdo que tiene su presentación no tiene nombre. Es más, anda por todos lados diciendo que él tiene un orden de prioridades distintas porque descubrió que el Macrismo gasta mucho en publicidad. La verdad es que él no está dando el ejemplo porque en eso está gastando a lo pavote. Uno no puede ver más que cuestiones de Lousteauen la ciudad de Buenos Aires, pero en realidad, el monto de la publicidad se aprueba con el presupuesto de la ciudad. ¿Quiénes lo votaron?: los legisladores de Suma Más, su partido. Lo votaron los legisladores de la Coalición Cívica y los legisladores del Radicalismo, que también lo acompañan. Lo votaron Nosiglia,Estenssoro, Hernán Rossi, todos ellos. O sea que él está cuestionando el orden de prioridades de un presupuesto que votaron sus propios legisladores”.
Sin embargo, Lozano recordó que no solamente en la “oposición” se dan estas incongruencias: “la locura esta se repite también en Recalde, que anda por ahí diciendo que en realidad se preocupa por los pobres de un gobierno que ni siquiera se anima a medirlos, y por otro lado dice que hay que terminar con el negocio inmobiliario y todavía no bajaron el Hollywood del Riachuelo que quieren hacer en la Isla Demarchi. El Polo Audiovisual es parte del negocio inmobiliario de Puerto Madero. Además, el Frente Para la Victoria, si hay alguna característica que tuvo, es que fue una bancada que incluso confrontó con las propias organizaciones sociales ligadas al FPV cuando se tuvieron que aprobar las desgravaciones de los polos, como el Tecnológico en la Comuna 4, o todo el plan maestro para la Comuna 8. Tuvieron confrontación directa con sus propias organizaciones porque terminaron traicionándolos en la Legislatura votando junto con el PRO”.
Patricia Walsh, desde siempre militante por las causas que involucran a los Derechos Humanos, rememoró, no sin cierta tristeza, que “la actuación del Frente Para la Victoria, cuyo bloque presidía en ese momento el diputado Juan Cabandié, hijo de desaparecidos como lo soy yo, hija de un desaparecido, fue dolorosa porque tuve que ver como se ponía al servicio de la intención Macrista y del ministro Montenegro para hacer los deberes de modo tal que el Fino Palacio llegara a continuación porque así lo habilitaba esa complicidad política. No son cuestiones menores. El Fino Palacio, la creación de la UCEP, los hechos de violencia que protagonizaron, la represión en los años siguientes del Indoamericano, del Borda, de la Sala Alberdi, todos hechos tremendos que hemos tenido en la Ciudad Autónoma de Buenos Aires dan cuenta de la gravedad de haber creado esta Policía en este contexto y que no iba a resolver la cuestión de seguridad sino que la iba a agravar. Eso fue exactamente lo que yo planteé en aquel momento en la banca”.
Walsh a continuación planteó la situación que impera en Buenos Aires con respecto a las fuerzas de seguridad: “en una ciudad como la nuestra, donde iban a tener que compartir –porque se iban a superponer en el territorio- la Federal con la Metropolitana, dos fuerzas no iban a traer más seguridad sino más inseguridad. Me quedé corta, porque en la Ciudad de Buenos Aires no tenemos dos fuerzas de seguridad. Tenemos la Metropolitana en 3 comunas, tenemos la Federal, la Gendarmería, la Prefectura y la seguridad privada. En el año 2015, ¿estamos más seguros? No, estamos más inseguros. Entonces, a la hora de hacer campaña, vamos a tener que recordarle a algunos que lo que están denunciando fue causado por ellos, y que no tienen la responsabilidad del que mira, del que se opone o denuncia, sino que tienen la responsabilidad política de haber sido socios cuando no cómplices”.
Fuente: www.unidadpopularcaba.org.ar
