La organización provincial organizó un evento en el «Muro de la vergüenza» y reclamó que no se construyan más presas.
(Primera Edición) La Mesa No a las Represas organizó un evento en el «Muro de la vergüenza» de la Costanera Sur de Posadas. Ambientalistas reclamaron que no se construyan más presas y se busquen alternativas.
“Desde la Mesa provincial vamos a seguir bregando por una provincia sin represas, que afectan el medio ambiente y que provocan el desarraigo de nuestros pobladores”, indicó Eduardo Luján.
El ambientalista fue uno de los organizadores del evento, que se llevó a cabo a la vera del “Muro de la vergüenza (avenida Mitre y Costanera Sur) de Posadas, y donde varios artistas realizaron un mini festival para recordar el lunes el Día Internacional de la lucha contra las represas.
“Nos reunimos varias organizaciones que nos sentimos afectados directos por las represas. Pero no sólo queremos quedarnos en el reclamo, en la lucha, sino también comenzamos a armar un modelo de desarrollo productivo totalmente distinto. Y creo que éste es el debate que está faltando, porque nosotros hablamos muchas veces de que la necesidad de energía es imperiosa, pero también tenemos que entender que para eso se necesita seguir con este modelo hiperactivista de recursos naturales”, indicó Luján.
Además, comentó que en “Misiones estamos viviendo una situación muy particular, porque siempre somos la provincia que aporta todos los recursos para estas mega obras. Ahora escuchamos de boca de varios funcionarios provinciales que están queriendo hacer Corpus, cuando se hizo un plebiscito donde se rechazó por más del 85%”.
En tanto, los integrantes de la Asociación de Trabajadores del Estado (ATE) también participaron del evento e indicaron que “formamos parte de la Mesa Provincial No a las Represas, junto a casi un centenar de organizaciones sociales de la región. Desde ese lugar, reafirmamos la lucha contra los proyectos hidroeléctricos que pretenden arrasar con nuestra provincia, condenar al éxodo y al desarraigo a miles de familias campesinas y pueblos originarios, y seguir matando nuestros ríos y recursos naturales para expandir un modelo energético”. “Somos afectados directos pese a no haber sido debidamente compensados: enfermedades (dengue, leishmaniasis, fiebre amarilla, etc), familias relocalizadas, desastre ambiental, pobreza y tarifas obscenas por la energía doméstica que consumimos los trabajadores”, agregaron desde el gremio.
“No quiero que más personas sufran lo que yo padecí”
Gladys es una de las miles de relocalizadas por la EBY. Perdió su hogar y hoy vive en un barrio alejado de su hábitat natural como ella eligió llamar a “la costa del río”.
“Allí crecí y estuve con toda mi familia por años. Hoy mucha gente me dice para qué vas a las marchas si no ganas nada, pero lo hago para que la gente tome conciencia de la gravedad de las represas, cuando me fui de la ribera se me fue parte de mi alma”, contó la mujer.
Por último, contó: “hoy vivo con mi hermana, somos dos familias. A veces, sólo la casa no hace a la felicidad”.
Rechazo rotundo de Maffei
La diputada nacional mandato cumplido por Unidad Popular (UP) y ex secretaria General de CTERA, Marta Maffei, estuvo acompañando a la Mesa provincial por el No a las Represas en la Costanera.
En ese lugar, en dialogó con PRIMERA EDICIÓN dijo: “Es vergonzoso ver cómo intentan separar a los pueblos, esto que tenemos atrás (el muro que separa el centro fronterizo) no debe existir”.
“Es para contener el chiquitaje, para impedir el paso de la gente, pero también tiene que ver con el autoritarismo de los funcionarios nacionales que cuentan con el consentimiento de las autoridades de la Provincia”, agregó Maffei.
La dirigente finalizó: “No hay que permitir las hidroeléctricas en nuestro país, porque tienen consecuencias mortales”.