Este jueves en la mayoría de las comunas, los movimientos políticos y vecinales se congregaron en distintas plazas o esquinas de la Ciudad Autónoma de Buenos Aires para denunciar este tremendo tarifazo que viene destruyendo las economías hogareñas, hasta el punto en que hay personas que, a pesar de trabajar 8 horas por día, deben dar de baja el servicio de internet y cable o se lanzan a llorar en las oficinas de alguna empresa de servicio porque no puede pagar lo que le vino.
En comuna 12 estuvo Gustavo Lahoud, referente de Unidad Popular, quien participó en una radio abierta que, al principio, comenzó con 4 personas, pero la actualidad de lo que salía del megáfono hizo que mucha gente saliera de sus casas, de los negocios o detuviera su andar para escuchar una problemática que los golpea salvajemente. Y al final, congregados terminó habiendo unas 500 personas. Lahoud comenta que “tratamos el tema de lo que está detrás del gran tarifazo del gas, qué es esta transferencia bestial de más de 3 mil millones de dólares gasíferas, principalmente YPF, Total y Panaman Energy, que por eso el gobierno no puede explicar la brutalidad e irracionalidad de este tarifazo que es brutalmente inequitativo y que, como tal, debe ser derogado. También convocamos a la gente para que se sienta segura en el hecho de no pagar porque hay una decisión de la cámara 2 de La Plata que así lo avala. Además hablamos de la problemática eléctrica y la falta de auditoría de los más de 5 mil millones de pesos que entre 2013 y 2015 tuvieron las empresas para hacer todo tipo de reparaciones en subestaciones, cables, transformadores, sobre lo cual no sabemos qué pasó. Denunciamos que probablemente parte de esa plata se haya ido en un proceso de valorización financiera, compras de acciones y títulos por parte de esas mismas empresas que también tienen intereses en todos los sectores hidrocarboríferos”.
Lahoud afirmó que “también abordamos el tema de la violación de la ley de ética pública donde hay funcionarios que están en las áreas de energía como otras ramas del gabinete que tiene que ver con empresas privadas y trasnacionales como Aranguren con el caso de importación de gas desde Chile más caro que el que traemos de Bolivia por Gasoducto o el que traemos en las terminales regasificadoras por barcos desde distinto puntos del mundo”.
La comuna 15 tuvo varios epicentros de manifestación, algunos organizados y otros espontáneos. Carlos Méndez, referente de Unidad Popular, estuvo presente en Lacroze y Corrientes. Allí, explica Méndez, “se juntaron 500 vecinos, manifestando pacíficamente la bronca, la idea de que algo nuevo debe pasar en argentina y que el gobierno escuche el reclamos de la gente que no quiere y no puede seguir sosteniendo a estas empresas”.
En Comuna 6, más precisamente la intersección de Rivadavia y Acoyte, a pesar de la lluvia, centenares de personas se apropiaron de las calles bajo sus paraguas. Allí estuvo Juan Pose, militante de Unidad Popular, comentó: “¿Por qué un empleados que trabaja 8, 10, 12 o hasta 14 horas diarias debe absorber el producto de pésimas políticas energéticas y económicas, mientras a las empresas mineras (todas extranjeras) se las exime de retenciones? ¿Por qué alguien que gana un salario mínimo ($6810) está obligado a pagar el gas, que le representa tal vez la mitad de su salario, cuando al terrateniente sojero también le quitan retenciones? ¿Por qué al trabajador que obtuvo paritarias muy por debajo de la línea inflacionaria, hay que cobrarle lo que jamás pagó la renta financiera ni el juego? ¿Por qué una PYME, generadora de trabajo y dinero debe afrontar aumentos impagables, cuando, al mismo tiempo se subsidia a las petroleras, financiándoles 3/4 de barril al doble del precio internacional?”.
Los tres compañeros de UP coinciden en que fue una manifestación popular muy importante y que debería repetirse.