Por octavo año consecutivo, en la Plaza 24 de Septiembre, se realiza esta conmemoración activa por los derechos humanos, donde participan distintos grupos partidarios, centros culturales y bibliotecas vecinales.
Carlos Méndez, de Unidad Popular comuna 15, y uno de los compañeros que, año a año, participa en la organización del festival, sostiene que “la vida del barrio se expresa por esta conmemoración de los derechos humanos y nos parece relevante poder sostenerla entre todos los grupos y los vecinos. Este año estamos, también estamos celebrando que Etchecolatz nuevamente esté en una cárcel común. Esto nos parece una semilla que ponemos cada año y pensamos que siempre habrá gente dispuesta a ser permeable a la motivación de los derechos humanos”.
Durante la jornada se realizaron varios números musicales, que iban del recitado hasta el baile, además de varios grupos de música, con el fin de generar una tarde agradable, donde el vecino, además de recordar pueda entretenerse.
En un momento del acto, se recordó a Cachito Fukman, militante que nos dejó hace unos años y quedó calado en la memoria del barrio, tal como lo demuestran las baldosas en su honor que, el año pasado, el colectivo, puso en la vereda de la plaza. “Cachito Fukman siempre estará con nosotros”, dice Méndez, mirando a los compañeros.
“Durante los primeros 6 años, Cachito siempre tenía el compromiso de hacer una especie de editorial de la actividad, con la cual algunos coincidíamos y otros no. Pero nos parecía muy bueno que un compañero, un vecino, un ex detenido desaparecido participara de esa manera. Hoy nadie ocupa su lugar, lo seguimos extrañando, y lo recordamos como un tipo solidario que no le negaba un saludo fraterno a ningún vecino, sea la ideología que fuera. Y siempre estaba dispuesto a una charla y una cerveza”, finalizó.