Por David Pike y Mariana Di Mauro,
En esta nueva sección de Resumen Latinoamericano (Argentina en cuestión), entrevistamos al histórico dirigente sindical y fundador de la CTA, Víctor De Gennaro. Líder de Unidad Popular y pre-candidato a intendente por el partido bonaerense de Lanús de la lista del Frente de Todos, donde competirá en las PASO junto a otros tres candidatos. De Gennaro responde sobre el gobierno de Macri, la fórmula Fernández-Fernández, su candidatura en Lanús y se hace un lugar para hablar sobre la vigencia del proyecto de la CTA.
-¿Cómo caracterizás el final de este período del gobierno de Mauricio Macri?
-Macri ha sido el ajuste sin anestesia desde el primer día y por eso desde el 24 de febrero del 2016 estuvimos en la Plaza de Mayo. Desde ahí no se paró hasta lo que fue esa gran rebelión en las puertas del Congreso en diciembre de 2017, cuando ellos ya pensaban que estaban asegurados después de su victoria electoral, pero se encontraron con la mayoría de la gente dispuesta a rechazar esas políticas de ajuste. Es cierto que tres días después, producto del pacto de gobernabilidad, muchos legisladores levantaron la mano en contra el pueblo. La mejor demostración de esto es el premio a Pichetto para que sea parte de la formula oficialista, ya blanqueando su relación con el poder.
En Lanús, también existe una expresión popular que fue creciendo frente a la crisis de representación de la dirigencia, que se denominó la Multisectorial, que motorizó la lucha de los estatales, docentes, feriantes, trapitos, que fue capaz de enfrentar los tarifazos y empezar a discutir el presupuesto municipal. Nosotros como experiencia política nos reconocemos como producto de ese origen.
-Tu partido Unidad Popular fue crítico del kirchnerismo, sin embargo desde hace un tiempo decidieron apoyarlo ¿Qué análisis hicieron para este cambio?
-El Instrumento Electoral Unidad Popular siempre ha planteado una transformación a partir de confrontar con todos los sectores del poder económico concentrado en Argentina y a nivel internacional. A mí me tocó ser diputado durante 4 años del 2011 al 2015 y siempre he apoyado las leyes que significaban un avance para el campo popular. Frente a las que consideraba que no lo eran, presentamos una alternativa. Entonces, en ese camino, el instrumento Unidad Popular fue planteando distintas alternativas.
Hoy estamos representados en 12 provincias, somos un instrumento electoral joven, muchos venimos de luchas sociales, sindicales, partidarias y de culturas distintas. Fue fundado en el microestadio de Lanús en el 2013 con 6 provincias organizadas. Actualmente, se ha desarrollado y formamos parte de ese conglomerado del campo popular. Por eso resistimos al gobierno de Macri desde el primer día, sobre todo por lo que significa a nivel regional en la perspectiva de ser el eje con Trump. Entendimos que para derrotarlo había que juntarnos y planteamos un frente con todos los sectores populares.
Desde hace ya un año hicimos un acto en Ferro, después algunos sectores optaron por candidaturas diferentes. Nosotros seguimos con un acto muy importante en la cancha de Atlanta en ocasión de la reunión del G20 en nuestro país, planteando nuestro rechazo a la presencia de esos sectores de poder. A partir de eso, lanzamos en nuestros congresos y en la propuesta general la constitución de un frente. Por suerte, hoy 18 partidos formamos parte del Frente de Todos con Unidad Ciudadana, el PJ y otros partidos que formamos parte de las experiencias populares.
– Siendo la vocación de UP la transformación y la disputa con los sectores concentrados de poder ¿Cómo recibiste la noticia de la candidatura de Alberto Fernández?
-Hay un estado de conciencia popular para decir “Fuera Macri” y eso es una de las cosas que nos trajo hasta acá. La otra es la actitud de Cristina que ha nombrado a Alberto Fernández demostrando que lo principal es la posibilidad de gobernar de una manera distinta y hay que abrir el espacio del gobierno. No estaba preocupada sólo en expresar una candidatura, sino también en pensar que hay que gobernar la crisis que deja este gobierno. Hay que abrir instancias para discutir democráticamente y sin tapujos lo que viene. En ese sentido, nos alentó mucho más a discutir las PASO, con la gente y a cambiar esta óptica de que el dedo de arriba decida las candidaturas.
– Antes de preguntarte por tu candidatura en Lánus, quería consultarte como referente histórico de la CTA por el futuro de la central ¿Qué vigencia tiene todavía el proyecto de la CTA en este nuevo escenario y qué posibilidades hay de que la CTA Autónoma pueda entrar dentro de la CGT?
-La crisis de representación no se resuelve cambiando a un representante, se resuelve teniendo poder en los representados. Y en ese camino a mí no me preocupa que un dirigente piense una estrategia o la otra, mientras sea democrático. La diferencia que tenemos con la CGT es que tiene un estatuto que el afiliado es el sindicato, no los trabajadores y la CTA defiende que los trabajadores y las trabajadoras somos los que tenemos que estar afiliados, hay una sola clase para nosotros.
Hay un cambio cualitativo después de la dictadura militar, ya no es solamente democracia contra burocracia, hoy es sindicalismo empresarial contra sindicalismo de los trabajadores. En ese devenir, la mayoría de los dirigentes se transformaron en empresarios, por eso la CGT es oficialista siempre. Fue oficialista con Menem e hizo que nosotros nos fuéramos y construyéramos una experiencia nueva. Se cayó el Muro y abrió una discusión de la necesidad de un tercer pilar, que es el que defendemos nosotros, la autonomía de los patrones, pero también del Estado y de los partidos políticos de la clase.
Entonces estábamos en una época de tránsito y no tengo la menor duda que marchamos a una nueva centralidad de todos los sectores combativos, pero claro con los valores de la CTA. Desde la época del anarquismo no hay una experiencia sindical que haya durado tantos años, al margen de la oficialista.
– ¿En Lanús, donde sos pre-candidato a intendente, como se expresó esta voluntad frentista de la que nos hablaste?
-En Lanús, está el cajero de Macri gobernando, lo que es un cachetazo para la cultura lanusense de una tradición popular muy importante. Las crisis anteriores permitieron que ganara alguien, no solamente acusado de tener cuentas offshore en Panamá, sino que también estuvo procesado por distintas actividades ilícitas en el Estado, pero sobre todo aquel que fue capaz, después de ser votado en el 2013 como concejal, de irse a trabajar de cajero del Secretario de Hacienda y no asentar ese mandato popular. Es el responsable que haya, en el último año 40 mil pobres más, de que existan hoy cerca de 85 mil pibes menores de 18 años bajo la línea de pobreza y 20 mil en estado de indigencia. Eso es Grindetti: Macri en Lanús.
Por eso fuimos conformando, a partir del año pasado, una auto-convocatoria a los distintos sectores y formamos el Frente Popular Lanusense junto al Polo Social, Vamos de La Dignidad y Patria Grande, Peronismo de Base, Conciencia Justicialista de Monte Chingolo, Patria Grande de Roberto Miguelez (histórico dirigente de Lanús) y otras experiencias más nuevas. Sectores que entendimos que había que ir construyendo un camino para gobernar distinto, y para eso hay que construir de manera distinta. Por eso nuestros candidatos fueron producto de jornadas de debates temáticos durante meses, donde discutíamos abiertamente en asambleas y que permitió que más de 400 compañeros votáramos una estrategia electoral que era pelear por las PASO, ahí yo acepté la proclamación de precandidato a intendente.
A partir de eso, sí reivindicamos un programa y una forma de organización popular. Por eso para nosotros es clave la construcción de 6 delegaciones en Lanús, que se han electo por voto directo en cada una de las localidades y que tengan la posibilidad de discutir el presupuesto participativo, de construir las prioridades de cada localidad y que sea un gobierno que democratice sus decisiones. Nosotros queremos llegar al 10% el presupuesto participativo. Además, tenemos una prioridad, que es en la única promesa que sí nos comprometimos y que, si nos llegan a bendecir con el voto, el 20 de diciembre de 2020 procederemos en una gran asamblea popular a declarar a Lanús una ciudad libre de hambre.
Nosotros estamos reconstruyendo eso. Y sí, yo me siento con alegría porque es mi barrio, mi comunidad, camino, hago la campaña caminando y saludando a los vecinos, entonces es una cosa que me conmueve y me alegra.
Fuente: www.resumenlatinoamericano.org