Claudio Lozano, dirigente nacional de Unidad Popular, se refirió al aniversario de los 45 años del Golpe de Estado y sostuvo que “frente a un nuevo 24 de marzo corresponde actualizar la memoria para echar luz sobre el presente y seguir contribuyendo a la tarea de hacer verdad ese sueño colectivo inconcluso por el que pelearon los 30.000 desaparecidos. Sueño colectivo de emancipación que desafió la estructura de poder de la Argentina y frente al cual las clases dominantes perpetraron un genocidio brutal en cuyo marco pusieron en marcha una verdadera estrategia de la desigualdad cuyos rasgos principales aun padecemos.
Desde hace 45 años, nuestro país, que era a mediados de los setenta una de las economías y de las sociedades más desarrolladas de América Latina, entró en un proceso de estancamiento y declive monumental. El producto por habitante, medida razonable de la creación de riqueza, del aumento de la productividad y del desarrollo de cualquier sociedad es hoy prácticamente el mismo que el de 1974. Es decir, el estancamiento es manifiesto. Situación que es el resultado de un proceso participación de los salarios en el producto se redujo en un 55 %, la pobreza creció en un 135 %, mientras el hambre (la indigencia) se expandió un 146 % midiéndola desde 1983 ya que en 1974 esta medición no existía, en tanto este problema tampoco era parte de la vida de los argentinos. Esta verdadera estrategia de la desigualdad fue simultánea al proceso de apertura, desregulación, endeudamiento, desindustrialización, concentración y extranjerización que vivió el país y que lejos de los anuncios neoliberales acerca de la lluvia de inversiones que viviríamos, se tradujo en una caída brutal de la inversión superior al 38 %.
El neoliberalismo impuesto a sangre y fuego en la Argentina fue cuestionado una y otra vez por nuestro pueblo. Desaparecidos, presos y exiliados fueron el saldo de la lucha antidictatorial que se materializó en la recuperación masiva de la democracia en 1984. Las experiencias populares desde ese momento en más, fueron capaces de cuestionar lo acontecido pero no lograron remover las bases fundacionales que la dictadura instituyera. Es más, aún en el marco de la institucionalidad democrática, primero durante la década de los noventa y luego durante los cuatro años del macrismo se profundizó el rumbo impuesto e incluso se intentó legitimar con los votos su consolidación institucional.
La experiencia vivida cuestiona a parte importante del sistema político tradicional, al tiempo que desafía e interpela a las organizaciones, experiencias y fuerzas políticas que hemos emergido de las luchas sociales posteriores a 1976. Parte importante de los detenidos desaparecidos eran menores de cuarenta años, al igual que hoy, una parte sustantiva de los desocupados, de los precarizados y de los presos de la sociedad en que vivimos. El Frente de Todos gobierna hoy nuestro país luego de un nuevo repudio del pueblo argentino al intento de legitimar democráticamente la experiencia neoliberal. El ejercicio de la memoria, la verdad y la justicia de este 24 de Marzo del 2021 pasa por asumir el desafío de transformar la creación electoral del Frente de Todos, en una fuerza política capaz de emancipar la Argentina. Con esta convicción, desde Unidad Popular ratificamos nuestro compromiso con ese sueño colectivo inconcluso por el que pelearon los 30000 desaparecidos.