Mientras se discute si se puede reducir o no la jornada laboral, es pertinente observar cómo se reparte la jornada laboral en la actualidad en nuestro país.
Los ocupados/as destinan 1 hora y 45 minutos de una jornada laboral de 8 horas para producir el equivalente al valor de su salario mientras el resto del tiempo, 6 horas y 15 minutos, lo dedican a producir un excedente que es apropiado en primera instancia por los empresarios.
Si el tiempo de trabajo dedicado a generar la ganancias y otros conceptos no salariales es el triple del tiempo de trabajo pagado, no hay razones para justificar que la reducción de la jornada laboral implica recorte salarial.
La información surge de asociar los datos de PBI con la información de la EPH al 1er trimestre 2021. El rendimiento de la hora trabajada es de $1.082 / U$S 12 y el salario promedio indica que el valor de la hora trabajada fue de $237/U$S 3 con lo cual la diferencia es de $846/U$S 9 es el excedente de explotación.
Detrás del argumento que dice que, a menor jornada corresponderá un menor salario está el engaño de siempre de hacer confundir “el valor del trabajo” con su forma salarial y asociarla a la jornada laboral habitual trabajada por los/as trabajadores/as.
Omite que en realidad no hay una equivalencia entre retribución salarial por hora y valor aportado puesto que la forma salarial “borra toda huella de la división de la jornada laboral entre trabajo necesario y plustrabajo, entre trabajo pago e impago. Todo trabajo aparece como trabajo pago».
Claudio Lozano