Tribunal ordena al Gobierno de la Ciudad revisar permiso de demolición en Parque Chas.
La Cámara de Apelaciones en lo Contencioso Administrativo y Tributario de la Ciudad de Buenos Aires hizo lugar parcialmente a una apelación presentada por la Asociación Civil Observatorio del Derecho a la Ciudad e impulsada por la 1ra candidata a Legisladora, la ing. Eva Koutsovitis, por la Alianza Confluencia con el patrocinio del Abog. Jonatan Baldiviezo.
La organización había cuestionado la decisión de un juez de primera instancia que rechazó una medida cautelar para detener la demolición de un inmueble ubicado en la calle Ávalos N° 1780, esquina La Pampa N° 5204, en el barrio de Parque Chas.
La asociación buscaba la nulidad de las decisiones del Gobierno de la Ciudad (GCBA) y del Consejo Asesor de Asuntos Patrimoniales (CAAP) que desestimaron la protección patrimonial del inmueble, así como la suspensión de cualquier permiso de demolición u obra. Argumentaban que este chalet era el último sin modificaciones desde el primer loteo de la zona y que poseía valor arquitectónico, histórico y cultural. Denunciaron falta de fundamentación en la desestimación del valor patrimonial y ausencia de participación ciudadana en el proceso.
La Cámara revocó parcialmente la decisión anterior y ordenó de forma cautelar al GCBA suspender todo permiso de demolición o construcción en la propiedad.
El tribunal señaló que la evaluación del CAAP, según la documentación disponible, no consideró todos los criterios de valoración que exige el Código Urbanístico, particularmente los aspectos histórico-cultural y ambiental.
La Cámara estableció un plazo máximo de 10 días desde la notificación de la resolución para que el CAAP elabore y acompañe a la causa un nuevo dictamen fundado, junto con los informes y documentos que sirvieron de base para su evaluación.
Contacto: Jonatan Baldiviezo (Whatsapp 15 3266-7008)
ANTECEDENTES
El inmueble sito en la calle Ávalos N° 1780 esq. La Pampa N° 5204 (matrícula catastral (Sección 061, Manzana 178, Parcela 001) se encuentra ubicado en el Barrio de Parque Chas en la Comuna 15.
El edificio construido en este inmueble es el último de los chalets que se mantiene sin modificaciones del primer loteo del barrio Parque Chas.
La Arq. Magdalena Eggers (Consultora de Códigos para construir en la CABA – Magister en Historia y Cultura de la Arquitectura y la Ciudad por la Universidad Torcuato Di Tella “El Barrio Parque Chas y su irrupción en la grilla porteña como tema de tesis” – Coordinadora Taller de Historia Oral del Barrio Parque Chas organizado por el Inst. Histórico de la Ciudad de Buenos Aires (1989-1991) – Presidente de la Junta de Estudios Históricos de Agronomía y La Paternal (1992-1999) – Secretaria de la Junta de Estudios Históricos de Agronomía y Parque Chas (2000-2005) detalla el valor patrimonial que tiene este inmueble.
“CONSIDERACIONES SOBRE SU VALOR PATRIMONIAL
Barrio Parque Chas fue el único y gran emprendimiento privado que a principios del siglo XX osó romper la cuadrícula porteña estipulada por la Oficina de Obras Públicas en el plano de 1904. Fue en 1925, con el auge europeo de los barrios parque derivados de la idea de ciudad jardín del inglés Howard, que el Dr. Vicente Chas logró aprobar en el Consejo Deliberante la Ordenanza que autorizó el trazado laberíntico que lo caracteriza.
A partir de ahí, siguiendo los preceptos europeos, realizó en 1926 un loteo sobre el sector norte del barrio con edificaciones a construir con estos parámetros (estableció una serie de exigencias como la de dejar 3 m de jardín al frente, prohibir la construcción de negocios en el interior del barrio, etc.), con una impronta pintoresquista que acentuaba las características residenciales.
Ofreció 100 lotes a la venta, en los cuales se construyeron alrededor de 80 chalets. El proyecto era de los arquitectos Zapiola, Acosta y Froio, los mismos que diseñaron y construyeron por esos años numerosos chalets de estilo inglés, muchos de ellos en City Bell para la desarrolladora de José P. Guerrico, creador de la ordenanza de barrios parque en la ciudad de Buenos Aires.
Con el correr del tiempo, todos los chalets fueron sufriendo modificaciones, salvo el de la esquina de Ávalos y La Pampa. Con una gran visibilidad debido a su ubicación, es el último bastión que nos recuerda ese primer gran loteo. El folleto de propaganda de esa gran venta justamente mostraba el modelo elegido para esa esquina.
Desde hace años esa casa se encontraba en venta y semi abandonada, y fueron varios los intentos por comprarla para ponerla en valor. Con el cartel de Vendido se reflotaron las esperanzas, hasta que apareció un cartel oficial con el Permiso de Demolición Total. Llamó mucho la atención el hecho de que en la base de APH1 no existan registros, a pesar de ser una edificación anterior al 31 de diciembre de 1941. Motivo por el cual, ante la solicitud de Demolición Total, se consultó al CAAP si poseía motivos para catalogarla.
En una reunión virtual realizada el 22 de octubre pasado, a la que asistieron Mariano PEDULLA (por la Comisión Especial de Patrimonio Arquitectónico y Paisajístico de la Legislatura de la Ciudad Autónoma de Buenos Aires); Carlos SUSINI BURMESTER (por el Centro Internacional para la Conservación del Patrimonio); Emilio BUGGIANI (por la Comisión Nacional de Monumentos, de Lugares y de Bienes Históricos); Diego BOYADJIAN (por la Facultad de Arquitectura, Diseño y Urbanismo – UBA); Marcela CLOT (por ICOMOS); Georgina PRIMO y Karen LOZZIA (por el Consejo del Plan Urbano Ambiental); y la Dirección General de Interpretación Urbanística, mediante notas respaldatorias de dicha votación –que no se encuentran publicadas en la página web– se recomendó DESESTIMAR la propuesta de catalogación del citado inmueble.
De los criterios que debe evaluar la CAAP, el primero es el valor arquitectónico: en este caso, el modelo pintoresquista planteaba un diseño de avanzada, con baño interior y dormitorios bien iluminados, muy alejado de las típicas casas tipo “chorizo” de la época, y que los arquitectos Zapiola, Acosta y Froio conocían muy bien de los modelos europeos.
El segundo es la ubicación, el entorno urbanístico del edificio. Tanto en esa cuadra como en las siguientes y a lo largo de la calle La Pampa, existen numerosos ejemplos de este tipo de arquitectura aunque, como ya se ha expresado, mayormente modificados. Salvo un grupo próximo a la calle Andonaegui que posee protección a nivel cautelar.
El tercer criterio es el de la relevancia histórica o cultural, que hace que un edificio que no tiene un gran valor material sea preservado. Este es el punto más importante, el significado de un primer gran loteo de un nuevo barrio, que en los años siguientes el rematador G. G. Grosso promocionaría como único en Sudamérica.
Es llamativo también tanto apuro del propietario en demoler la construcción, ya que no posee ningún tipo de autorización a construir aún. Apenas se ha presentado una consulta a la Dirección General de Interpretación Urbanística, por ser una urbanización especial (U39), dadas las características del barrio ya mencionadas. Estimamos que quieren borrar toda huella de nuestra memoria para poder así plantar una edificación maciza como las que pululan ya en cualquier barrio de esta ciudad”.
Por su parte, la Doctora Isabel Plante (Historiadora del arte, Investigadora independiente – Centro de Investigaciones en Arte y Patrimonio, Consejo Nacional de Investigaciones Científicas y Técnicas – Universidad Nacional de San Martín (CIAP, CONICET-UNSAM), también detalla el valor patrimonial de este inmueble:
“Buenos Aires, 23/12/2024
Ref: ÁVALOS 1780 ESQ. LA PAMPA 5204. S061-M178-P001
CONSIDERACIONES SOBRE SU VALOR HISTÓRICO y PATRIMONIAL.
De mi mayor consideración,
A continuación, se exponen argumentos e información con el objetivo de que contribuir a revisar decisión de desestimar la catalogación del inmueble, tomada por el Consejo Asesor de Asuntos Patrimoniales (CAAP, https://buenosaires.gob.ar/normativa/consejo-asesor-de-asuntos-patrimoniales) en el
22 de octubre pasado, en base a motivos que no fueron publicados en la página web y con la consecuencia de que fuera aprobada su demolición total.
El chalet de la esquina de La Pampa y Ávalos constituye un caso extraordinario: de las construidas contemporáneamente al trazado del barrio parque tal como fue concebido por el doctor Vicente Chas en 1925, es la única casa conservada en su estado original. De esos 100 lotes ofrecidos a la venta en aquel momento, se construyeron alrededor de 80 chalets en base al proyecto de los arquitectos Zapiola, Acosta y Froio, que tenían experiencia en diseño y construcción de chalets de estilo inglés. Y esta es una de esas casas. Pero además, de las tipologías propuestas por dichos arquitectos, es precisamente ese modelo de casa de esquina el que se eligió para la portada del folleto publicitario impreso por el doctor Chas para ofrecer dichos lotes y las casas de estilo pintoresquista que se vendían con planes de cuotas.
Así, la casa en cuestión, que podríamos bautizar como el chalet histórico de Parque Chas, es el último ejemplar arquitectónico propio de la propuesta urbana que caracteriza al barrio, su concepción como barrio-parque. No es exagerado plantear que este chalet histórico constituye una parte fundamental de la memoria de Parque Chas y de su identidad visual y urbana.
Parque Chas es conocido como un barrio singular, caracterizado por su traza irregular y su arquitectura baja a escala humana, que ofrece jardincitos delante de buena parte de las fachadas. Como tipología urbana, un barrio-parque incluye la sorpresa que posibilitan las calles curvas, donde a falta de perspectivas con largas fugas de calles rectas, solo se descubre en la medida en que se recorre. Pero además, el barrio-parque ofrece una mayor proporción de espacio verde en las parcelas. De allí que el retiro respecto de la línea municipal, que deja un pequeño jardín delante de las edificaciones, resulte clave en la identidad visual y urbana de este barrio. De igual modo, el estilo pintoresquista propuesto como parte de este emprendimiento inmobiliario ya centenario, estaba asociado a la idea de que la urbanización planteada no repetía la traza apretada y cuadriculada, sino que se proponía como un barrio tranquilo, ventilado y suburbano.
El chalet que defendemos tiene un valor histórico y patrimonial clave, en tanto ejemplo único de una propuesta urbana y arquitectónica para sectores medios y bajos. No se trata de un petit hotel perteneciente a familias patricias o de la alta burguesía local, sino de un sitio histórico vinculado a la expansión urbana de Buenos Aires y a su singular historia inmigratoria. Su valor extraordinario no resulta de la rareza de sus materiales, de la sofisticación de su proyecto, ni de la amplitud de sus dimensiones, sino que radica en que forma parte del origen del legendario barrio de Parque Chas. Quienes integran la CAAP -Mariano Pedulla (por la Comisión Especial de Patrimonio Arquitectónico y Paisajístico de la Legislatura de CABA), Carlos Susini Burmester (por el Centro Internacional para la Conservación del Patrimonio), Emilio Buggiani (por la Comisión Nacional de Monumentos, de Lugares y de Bienes Históricos), Diego Boyadjian (por la Facultad de Arquitectura, Diseño y Urbanismo, UBA), Marcela Clot (por ICOMOS), Georgina Primo y Karen Lozzia (por el Consejo del Plan Urbano Ambiental)- y la Dirección General de Interpretación Urbanística, que avaló dicho dictamen, probablemente no contaban con la información que respalda este informe. Solo así resulta viable que quienes tienen la responsabilidad de velar por el patrimonio arquitectónico de nuestra ciudad, hayan tomado la mencionada (y desafortunada) decisión.
Mientras escribo estos argumentos, la demolición ha sido iniciada. Aún así, estamos a tiempo de proteger la historia de Parque Chas y su cultura material. Confiando en sus capacidades de reflexionar sobre este asunto, les saluda atentamente”.