De Gennaro: "No hay que entregarse ni ser sobreviviente"

El candidato presidencial por el Frente Popular inauguró el lunes un local de Unidad Popular en el centro de Roca.
(Diario Río Negro) «Existe una posibilidad de gobernar de una manera distinta la Argentina. Algunos intentan convencernos de que es mejor entregarse y ser sobreviviente. Nosotros decimos que se puede ser feliz en la Argentina, que hay capacidad para generar trabajo, que sobra comida, que es posible tener educación y salud».
Con esa propuesta desembarcó ayer en Roca el diputado nacional Víctor De Gennaro, candidato presidencial de Unidad Popular.
Acompañado por dirigentes de Río Negro y Neuquén (donde hoy seguirá de campaña), el fundador de la Central de Trabajadores Argentinos inauguró por la mañana un local partidario en la esquina de Rodhe y Avenida Roca, para instalarse luego en pleno centro para reforzar el contacto con los vecinos y transmitir su propuesta.
De cara a las PASO de agosto y las generales de octubre, De Gennaro sostuvo «Scioli es Cristina y después están Massa, Macri, Cobos… estamos yendo no sólo hacia más de lo mismo, sino empeorando».
Por eso instó a construir una alternativa de gobierno, alejada de los dirigentes que representan «el ajuste y la concentración de la riqueza».
«No compartimos la idea de que la política la hacen los que tienen plata, la política es una herramienta fundamental para que nosotros demostremos la capacidad de gobernarnos a nosotros mismos», argumentó en la rueda de prensa previa a la apertura formal del local.
El dirigente destacó el esfuerzo de los dirigentes que lo acompañan desde el norte de la Patagonia, por el valor de «estar caminando, poniendo el cuerpo, iniciando un proceso de voluntad política de transformación».
A la hora de describir sus propuestas, habló de garantizar la doble escolaridad en la Argentina, porque eso «significaría medio millón de puestos de trabajo en la docencia, serviría para una formación distinta y además sacaría a la mayoría de los pibes que hoy están en los barrios sin hacer nada para darles una perspectiva distinta de comunidad».
También alentó una política menos permisiva con las petroleras, mineras y otras industrias que hoy se llevan recursos del país, para obtener mayores fondos y aplicarlos a las actividades productivas primarias, como la fruticultura del Alto Valle.