La diputada de PARES impulsa un proyecto propio para solucionar problemas hídricos erradicando obras no autorizadas. Se trataría este jueves.
(Elprotagonistaweb) La diputada provincial Verónica Benas (PARES-FPCS), por intermedio del Proyecto de Ley de su autoría, propone que se establezca, a través de cinco artículos cuidadosamente elaborados, “un plan de relevamiento anual en todo el territorio provincial destinado a la detección de canales y desagües clandestinos, encauzamientos de cursos de agua u obras hidráulicas no autorizadas que modifiquen el natural escurrimiento de las aguas”.
Benas acordó con sus pares un tratamiento preferencial para la sesión ordinaria de este jueves 15 de octubre, en tanto y en cuanto obtenga los despachos de las comisiones de Medio Ambiente y Recursos Naturales y de Asuntos Constitucionales y Legislación General y, además, el consenso en Labor Parlamentaria.
La ejecución del plan de relevamiento anual incluirá, con preferencia, el uso de tecnología satelital y demás técnicas que permitan realizar informes periódicos con escalas de observación que impliquen un alto nivel de detalle de las zonas consideradas y, en ese sentido, el Ministerio de Aguas, Servicios Públicos y Medio Ambiente de la Provincia, que será la autoridad de aplicación de la presente Ley, arbitrará las medidas necesarias para “la erradicación de las obras no autorizadas”.
Dicho Ministerio, además, establecerá reuniones periódicas con miembros de los Comités de Cuenca y representantes de los Municipios y Comunas, con el fin de contribuir al plan de relevamiento, y, asimismo, delineará estrategias conjuntas que apunten a la concientización sobre la problemática hídrica, poniendo especial énfasis en aquellos individuos que hubieran resultado infractores.
Se dispone, igualmente, la creación de una línea telefónica gratuita (0800) -en la órbita del mencionado Ministerio-, destinada a la recepción de denuncias referidas a la localización de canales y desagües clandestinos, así como a la detección de obras hidráulicas no autorizadas que pudieren afectar el escurrimiento natural de las aguas.
«Resulta evidente que el impacto sobre los cursos de agua no es responsabilidad exclusiva de quienes realizan canales clandestinos en sus predios rurales. También en la periferia de los grandes centros urbanos o en las ciudades vecinas han crecido exponencialmente loteos y nuevas urbanizaciones, a veces en terrenos de dudosa aptitud, que producen un impacto significativo en las cuencas hídricas aledañas. Somos conscientes de que la cuestión presenta múltiples facetas como ser la adecuación de obras de infraestructura, los esquemas productivos que favorecen la excesiva impermeabilización de los suelos, el desarrollo de nuevas urbanizaciones aledañas a los grandes centros urbanos, así como los encauzamientos clandestinos en áreas rurales», fundamentó la diputada. Y reiteró que, de esta manera, «se busca la erradicación de obras no autorizadas que pudieran potenciar los riesgos de inundación de asentamientos poblacionales”.
Fuente: Susana Goris