Sobre la caída de una tarde polar, se celebró ayer el tercer Congreso Argentino de Estudiantes de Nutrición y fue el marco de inauguración de la primera Cátedra de Soberanía Alimentaria en la Universidad de Medicina de la Universidad de Buenos Aires.
Convocados en uno de los salones de esta casa de altos estudios, asistieron más de 300 personas entre estudiantes e invitados. En una de las bancas de los concurrentes se encontró la Diputada Nacional por la Ciudad de Buenos Aires y Candidata a renovar su banca con Camino Popular, Liliana Parada.
Coordinadora del Frente Parlamentario Contra el Hambre, Parada sostiene desde su cargo un compromiso activo con las políticas e iniciativas apuntadas a garantizar una alimentaciòn adecuada en la población; en este sentido, organizó la primera audiencia pública sobre soberanía Alimentaria en el ámbito de la Cámara de Diputados de la Nación.
En su anteproyecto por la ley marco de derecho a la alimentación con soberanía alimentaría, la Diputada Parada postula: “La presente ley tiene por objeto establecer el marco normativo e institucional para la elaboración e implementación de políticas públicas que garanticen el Derecho Humano a la Alimentación adecuada de todas las personas que habitan la Nación Argentina en el marco de la Seguridad y Soberanía Alimentaria”.
Las participaciones programadas de la actividad comenzaron con el Doctor Sergio Varela. El médico declaró: “el futuro va a estar en el alimento, en el agua y en la nutrición de los pueblos” y exclamó con alegría: “celebro la existencia de esta cátedra”. Le continuó Laura López, directora de la escuela de nutrición, quien relató que los ideólogos de esta cátedra abierta fueron los propios estudiantes y que a menos de un año de emprender el proyecto ya formaron un espacio para generar nuevos conocimientos. López agregó: “La Universidad no puede estar nunca ajena al compromiso social”.
El salón normalmente está vestido con majestuosas cortinas púrpuras y adornada con mesadas de mármol y bustos que homenajean a los padres y próceres de la medicina argentina. Para la ocasión y con el mayor de los respetos, el espacio vivió una desestructuración con afiches de cartulinas de colores con leyendas escritas a mano. “Soberanía alimentaría es un pueblo libre eligiendo qué y cómo comer”.
La palabra pasó a boca del Doctor José Carlos Escudero, médico sanitarista, sociólogo e investigador de la Organización Mundial de la Salud. “El estudio sobre el comportamiento de la alimentación en el planeta ha vivido un cambio radical y positivo y esta cátedra es el resultado”. Para cerrar, el doctor soltó una pregunta retórica: “¿Cómo es posible que se mantenga un modelo sojero que, además de consumir excesiva energía exógena, es contraproducente para la salud de la población y que ya ha mostrado evidencias de ser inviable?”.
Dos conceptos funcionaron de hilo conductor entre quienes hicieron uso de la palabra; que esta propuesta universitaria es conclusión de un cambio paradigmático en el abordaje del tema y que los modelos extractivistas no son sustentables.
En su turno, el Ingeniero agrónomo Carlos Carvallo alegó justamente esto: “la emergencia de cátedras de soberanía alimentaria – existen otras, por ejemplo, en la Universidad de La Plata y en la Facultad de Agronomía de la UBA – es el producto de una toma de conciencia sobre una problemática que ha intentado ocultarse nacional e internacionalmente”. Carvallo entiende que esta mirada sobre la trascendencia de políticas alimentarias debe tomar un carácter interdisciplinario. “Es el debate de ideas sobre el desarrollo de alternativas de producción y tenemos que construirlo cada uno desde nuestros espacios”.
Myriam Gorban fue la quinta y última oradora del cuerpo docente y la más destacada. Gorban es licenciada en Nutrición, secretaria general de la Confederación General de Profesionales de la República Argentina, vicepresidenta de Médicos del Mundo (en Argentina) y miembro del Secretariado Ejecutivo de la Federación Argentina de Graduados en Nutrición; además es autora de “Seguridad y Soberanía Alimentaria”. En estado de emoción palpable, Gorban hizo referencia a la interacción entre la academia y la sociedad. “Es la participación de la gente que vivie, que lucha, que sufre y que sueña; si nosotros, los profesionales no sabemos cuidar la vida tenemos que replantearnos nuestra función”.
La Diputada Parada, diría una vez finalizada la actividad: “creemos que la mejor manera de garantizar el derecho a una alimentación adecuada es ejerciendo nuestra Soberanía Alimentaria, que concibe al sistema alimentario como un Todo: las cadenas productivas, el comercio, el trabajo, las economías regionales, el poder de los super e hipermercados, las políticas públicas y el consumo responsable, convirtiéndola en una herramienta fundamental para el desarrollo social y económico de nuestro país”.
Pablo Ruino y Gonzalo Alemán, estudiantes y organizadores hicieron el cierre de las oratorias: “El concepto de soberanía alimentaria es utilizado por algunos personajes para posicionarse políticamente; otros hemos decidido asimilarlo como una forma de vida”.
Continuado a la presentación, se inició la primera clase de esta cátedra abierta que prolongará su cursada curricular hasta noviembre.