Organizaciones estudiantiles preparan un “estudiantazo” para el viernes 6 de mayo en La Plata.
Así lo adelantaron desde la Federación Universitaria de La Plata, luego que se conociera que el gobierno bonaerense no tiene pensado implementar la gratuidad del boleto estudiantil. La Ley 14735, aprobada por todos los bloques en 2015 contempla el boleto gratuito para los estudiantes de todos los niveles de la enseñanza y está contemplada en el presupuesto provincial para 2016.
Desde la FULP afirman que la movilización convocada a la Casa de Gobierno será “multitudinaria”.
“La gobernadora (María Eugenia) Vidal pretende dilatar la implementación del boleto y recortarlo, pero no nos vamos a quedar de brazos cruzados”, señaló el titular de la Fulp, Darío Estevez.

Leo Vázquez es secretario de Juventud de UP y también conforma el Consejo Directivo Nacional de ATE, es además, Auxiliar de Educación, trabajadores que inicialmente estaban contemplados dentro de la gratuidad del boleto, pero quitados más tarde en el debate que llevó su implementación. De todas maneras, la Ley fue aprobada y contó con el apoyo de los trabajadores de le educación “porque entendíamos que el boleto estudiantil de los niveles primario, secundario y terciario era un avance, y acompañamos esa iniciativa porque lejos de ser una derrota, avanzábamos” afirma Vázquez en declaraciones a Unidad Popular.
Para agregar, analizando lo que está ocurriendo plantea “que lo que formulan los funcionarios de la Subsecretaria de Transporte es que no lo aplican “por problemas técnicos”. Nosotros, las organizaciones, los sindicatos, y partidos políticos decimos que esto es la falta de voluntad política de destinar los recursos a los sectores que más lo necesitan y decimos que si la provincia de Buenos Aires no destina fondos, no le interesa la educación”.
La Ley es fruto de la puesta en común de nueve proyectos legislativos, fue aprobada en la Legislatura por todos los bloques en 2015, está contemplada en el presupuesto provincial para 2016 y su aprobación saldó una deuda histórica y política, a 40 años de La Noche de los Lápices, su no implementación es un cachetazo a la justicia y a la memoria colectiva.