El dirigente de Unidad Popular Salta, Edmundo Falú, aclaró que su partido no fue invitado ni antes ni ahora a dialogar con el gobierno. También critica el rol de la oposición y las propuestas de Nanni sobre la Auditoría General de la Provincia.
El ex candidato a Gobernador de Salta, Edmundo Falú, ha aclarado en su cuenta de Twitter que el partido al que pertenece -Unidad Popular- nunca fue invitada al «diálogo político», ni en el inicio del tercer mandato de Urtubey ni en esta oportunidad.
Falú, hijo de uno de los hombres más influyentes del peronismo salteño de todas las épocas, ha desmentido así el pretendido carácter plural y abierto de la convocatoria lanzada por Urtubey a las diferentes fuerzas políticas. Su exclusión de la mesa de diálogo no parece tener razones ni bases sólidas.
Sobre la conformación y el papel de la Auditoría General de la Provincia, el dirigente de Unidad Popular ha salido al cruce de las recientes afirmaciones del diputado nacional Miguel Nanni, quien pidió al Gobernador de la Provincia que la AGP estuviera «dirigida y presidida por un opositor».
Para Falú el tema es «mucho más profundo» que la simple decisión de entregar la Auditoría General a la oposición.
En comunicación con Iruya.com Falú ha dicho que la gestión de la AGP debe basarse en principios claros y estables como la «autarquía administrativa y financiera y la colegiación de las resoluciones».
En la conformación de la AGP -sostiene Falú- se ha de respetar una «verdadera representación de la minoría» y ofrecer garantías para que cualquier ciudadano tenga la posibilidad de denunciar «un hecho que pueda afectar el patrimonio de la Provincia».
CRÍTICAS A LA OPOSICIÓN
Sin circunloquios y con una claridad poco frecuente entre los políticos de su generación, Falú señala a la oposición como responsable del descalabro institucional que vive Salta.
En nuestra provincia, lamentablemente -dice Falú- «la oposición fue funcional a decisiones del gobierno que afectaron profundamente el funcionamiento de instituciones clave, como la Auditoría General de la Provincia o el Consejo de la Magistratura».
Para el dirigente de Unidad Popular, «un diálogo serio implica respetar el espíritu de la Constitución provincial por parte de todos, especialmente del oficialismo».