Representantes de los bloques opositores de la Cámara de Diputados provincial exigen que el gobierno de Scioli declare la Emergencia Alimentaria por el plazo de un año, temiendo que durante el 2013 existan faltantes de alimento en las escuelas provinciales.
El proyecto de Ley fue elaborado por la diputada del FAP, Rita Liempe, y acompañado por todo el arco opositor de la legislatura bonaerense. “Debemos garantizar que en el año entrante los programas encargados de brindar alguna prestación alimentaria a nuestros niños tengan continuidad y no resulten afectados por problemas en la cadena de pagos, tal como está ocurriendo en este 2012”, enfatizó la diputada Liempe.
La declaración de Emergencia obligaría al gobierno de Daniel Scioli a cumplir inexorablemente con todos los plazos que se fijen para el año entrante en materia alimentaria. “Es una necesidad primordial que se entreguen los insumos básicos a aquellas instituciones que estén realizando alguna prestación en materia alimentaria. Y es el Ejecutivo quien debe garantizarlo”, apuntó el diputado socialista Ricardo Vago.
Según lo expresado en el texto de la Ley, los niños no pueden dejar de percibir la alimentación segura en un momento tan importante de su vida, y está relacionado con el correcto crecimiento físico y psíquico de nuestros menores. Por esto, y en las postrimerías de votarse la Ley presupuestaria para el año entrante, el conjunto de las fuerzas opositoras expresa su preocupación al considerar que “es inadmisible otro año donde la provincia no cumpla con los tiempos de pago a los proveedores. Ya que esto desencadena una situación de la que ningún funcionario público debería participar: la falta de comida en los comedores”, señalaron desde la legislatura.
El espíritu de la Ley se inscribe en los más de 2.025.508 niños, niñas y adolescentes escolarizados que reciben la prestación del Servicio Alimentario Escolar, y que ven afectados su desayuno o merienda, por problemas que los exceden.
El diputado de la Coalición Cívica, Walter Martello, planteó que “las Unidades de Desarrollo Infantil (UDI), otro de los subprogramas de Desarrollo Social, brindan un espacio de contención a unos 70 mil niños y niñas en todo el territorio provincial. Este programa es esencial, ya que es una herramienta fundamental para las vidas de nuestros niños en la provincia que nos toca vivir. Lamentablemente, hoy, son nuestros niños los que están pagando la crisis que atraviesa la Provincia de Buenos Aires y tristemente, advertimos una vez más, que la cadena se corta por el eslabón más débil”.
En este sentido, la diputada del FAP Rita Liempe, aseguró que “hay que trabajar fuertemente para revertir esta situación generando puestos de trabajo, mayor distribución de la riqueza, para que sea el hogar el espacio de alimentación, de habitación, juego y contención de todas las personas durante los primeros años de vida”.
Como es de público conocimiento hace más de 6 meses que se viene adeudando el pago a los proveedores de comedores escolares, como así también a las Unidades de Desarrollo Infantil (UDI). Medios de Comunicación, manifestaciones de diversas organizaciones sociales y trabajadores del propio estado vienen denunciando, la difícil situación que llevó al cierre de los comedores escolares y de jardines y que resulta cada vez más difícil sostener aquellas instituciones que en los barrios más desprotegidos trabajan para contener y proporcionarles alimentos a los niños, niñas y adolescentes más vulnerables.
El proyecto fue acompañado por los diputados del FAP Alfredo Lazzeretti, Ricardo Vago, Aldo García, Mirta Lazpiur, Juan Carlos Juárez y Pablo Farias; de la Coalición Cívica Marcela Guido, Walter Martello y Oscar Negrelli; de la UCR, Valeria Arata y Alejandro Armendariz; de Alternativa Peronista, Ricardo Lissalde; del PRO Peronismo, Jorge Alves; y de la Unión Celeste y Blanco, Mónica López.
