Unidad Popular repudia el violento desalojo de las familias de Guernica y la criminalización de la protesta social. No es con palos, gases y balas de goma como se resuelve el déficit habitacional.
En medio de la brutal crisis económica y sanitaria, con un marcado deterioro social y laboral y más de 20 millones de compatriotas por debajo de la línea de pobreza, la violencia institucional no es la respuesta que esperamos a las legítimas demandas de miles de familias en la calle que reclaman por un techo propio.
La selfie de los fiscales que ordenaron el desalojo mientras se ejecutaba la represión de gente indefensa, es un ominoso retrato de la injusticia social. Exigimos la urgente liberación de las y los detenidos en la toma de tierras en el conurbano bonaerense.
UP reitera la necesidad de poner en marcha un plan de construcción masivo de viviendas, aprobar un Salario Básico Universal y el Impuesto a la Riqueza para que no sean los mismos de siempre los que paguen los costos de la crisis agravada hasta niveles intolerables por la pandemia.