24.02.2009
Por Víctor De Gennaro*
Hasta hoy, más de 3.500.000 jubilados y pensionados cobran $690 por mes, de “beneficio” mínimo, después de una vida de esfuerzo y aporte en la construcción de nuestra Nación. De acuerdo con los nuevos anuncios, serán premiados con $80 resultantes de la aplicación de la fórmula esotérica que aprobaron los legisladores, a propuesta de la presidenta Cristina Fernández, lo cual significa un incremento menor a $3 por día. ¿Faltan aportes para consumar tamaña injusticia?
La respuesta es no. En la ANSES sobra plata. Y a los trabajadores y jubilados, dueños de ese organismo, no se nos consulta y nos estafan para hacer negocios en lugar de garantizar los derechos previsionales de nuestros compañeros.
A pesar de que entran, a partir de enero, en la ANSES 13.000 millones de pesos más por año de aportes provenientes de los nuevos afiliados/as de las ex AFJP, más el dinero de superávit, al Gobierno ni se le cruza por la cabeza acercar los haberes de nuestros viejos al mínimo de $1.570 que exigen los jubilados.
Se versea con el 11% ahora y el 7% en septiembre, cuando la inflación en 2008 fue mayor al 20% y los alimentos subieron más del 30 por ciento.
Este engaño de la movilidad jubilatoria restringida le permitirá al Gobierno disponer de un nuevo ahorro de 18.000 millones de pesos al finalizar 2009. Pese a la retórica de la distribución de la riqueza con la que se ornamenta el “relato” oficial desde los atriles de Olivos, sigue la misma historia que ha permitido un ahorro de $22.345 millones en el período 2004-2008, bochornosamente destinado al pago de deuda pública.
Además, utilizan la plata de los jubilados y pensionados para financiar los paquetes anticrisis anunciados por la Presidenta. Ya se han destinado: $3.100 millones para la compra de autos 0 km, a la que el 70% de los jubilados no puede acceder por superar la edad máxima que fija el seguro; $650 millones para la compra de taxis 0 km; $3.500 millones en créditos para electrodomésticos; $3.000 millones en créditos a las PYMES; $1.700 millones de crédito para el agro y $1.250 millones en crédito para las empresas industriales.
A su vez, se prevé encarar el megaplán de Obras Públicas por el cual se han firmado convenios por $10.900 millones para la construcción de viviendas; $4.074 millones para el soterramiento del Ferrocarril Sarmiento; $1.500 millones en la construcción de las centrales térmicas en Buenos Aires y Santa Fe; $1.000 millones en la construcción de la central eléctrica de Pilar (Córdoba) y $890 millones en un crédito para que AYSA construya dos plantas potabilizadoras.
De este modo se han comprometido $31.564 millones de la ANSES en financiar el consumo de altos ingresos y un plan de obras públicas motorizado por empresas privadas.
Sólo con la plata destinada a las medidas de gobierno se podría dar un aumento mensual de $500 por jubilado, es decir aumentar el 70% de la jubilación mínima, con lo cual se indicaría el comienzo del camino de recuperación y reparación hacia lo que hoy exige la sociedad para con nuestros mayores.
Basta de verso, la plata está y el Gobierno elige a quién dársela.
*Secretario de Relaciones Institucionales CTA.