Frente a la ausencia de políticas efectivas en materia de alimentación y salud, que golpea a todo el territorio del norte provincial, el Instrumento Electoral por la Unidad Popular de Salta Capital realizó este fin de semana, en la localidad de Pichanal, la entrega de alimentos y 300 prendas de ropas de niños y adultos, al Padre Fray Roberto Velásquez, referente de la Misión San Francisco. Los alimentos y la ropa fueron recaudados en el festival solidario por los pueblos originarios que llevó a cabo la juventud del UP a principios de mes. La actividad permitió la inserción a territorios histórica y actualmente postergados del norte salteño. Pero, como redactamos en el documento que acompañó a la mercadería “entendemos que la entrega no representa, ni por cerca, una solución a las problemáticas recalcadas a nivel nacional por los compañeros de las comunidades originarias. Pero si es una acción efectiva frente al sistemático desconocimiento del Gobierno Provincial, que niega las muertes por desnutrición con la impunidad que caracteriza a los regímenes feudales.”
Hicimos pie en la Misión San Francisco, de Pichanal, donde viven cerca de 6 mil guaraníes, 156 coyas, 832 criollos y 257 bolivianos, que han cerrado las puertas a los embates de las fuerzas regionales, como por ejemplo, el justicialismo. Los compañeros saben quién es quién, y qué quiere cada uno. Sin embargo, la experiencia de la UP fue distinta. El núcleo indígena más grande de Salta, y uno de los más importantes en Argentina, recibió a la juventud del partido con las puertas abiertas. De la reunión con los vecinos y miembros de la Iglesia referentes en el territorio, la proyección de trabajo es infinita, con la voluntad mutua de abordar todas las aristas posibles.
Allí mismo marcha a pasos acelerados la constitución de un local y merendero que en la puerta tendrá el cartel del Instrumento Electoral por la Unidad Popular. Los compañeros de Pichanal avanzan también en el mapeo y la junta de adhesiones. Y la coyuntura política, tanto nacional como provincial, nos indica que asistimos a la antesala de una fractura única en el aparato corrupto y asistencialista.
Sólo en la Misión San Francisco, la realidad en materia sanitaria es devastadora. Allí viven 863 niños de entre 1 y 5 años y 164 menores de 1 año. De ellos, 52 tienen déficit alimentario y 84 se encuentran bajo la guadaña del riesgo nutricional. Si no son asistidos con urgencia, morirán. El Estado, nuevamente, no traza acciones eficaces y rápidas. En la Misión San Francisco, durante 2008, 9 actas de defunción estaban selladas con la firma de la desnutrición. En 2009 fueron 7 y en 2010 fueron 6. La situación no es diferente en el resto de Salta: en 2011 fueron 11 los muertos de hambre. Esos números no incluyen las actas de defunción firmadas como “paros cardíacos” o “neumonía”.
A una hora de Pichanal, en San Ramón de la Nueva Orán, nada cambia. La conducción oficialista intenta ocultar un nuevo escándalo por corrupción. Mientras los changuitos se nos mueren, ellos se enriquecen. Radio Cadena NOA de Orán informó hace dos días que llega a 20 millones de pesos la defraudación municipal en esa ciudad que involucra al jefe comunal Marcelo Lara Gros y al ex secretario de Hacienda, Darío Zabala. “La investigación de la AFIP determinó que el ex funcionario posee cuentas bancarias con 12 millones de pesos, entre cuentas propias y cuentas compartidas en los bancos Macro, Santander Río y Nación, Se calcula que Zabala habría gastado cuatro millones de pesos entre automóviles, propiedades, terrenos y gastos personales en viajes mientras era funcionario municipal”, anuncia la prensa local.
Y allí también hicimos pie con la juventud de la UP. puntualmente, en el barrio obrero San Cayetano, cuya construcción está apuntalada desde la Central de Trabajadores de la Argentina (CTA). Allí también se está levantando el local de la Unidad Popular, sobre el barro que los militantes de café no se atreven a pisar.
La realidad impone su rigor. Hay oranenses que asisten a la emergencia habitacional pero prefieren poblar, pagando y todo, las viviendas del Estado, antes que resistir en tierras donde no tienen que poner ni un peso por las parcelas, como en San Cayetano. Donde son tres las condiciones para vivir: Trabajar por la organización popular y comunitaria del barrio, no negociar las tierras y no vender droga. El kirchnerismo se ha filtrado en los focos de resistencia comunitaria al punto de generar una apatía política, difícil de discutir en los barrios. San Cayetano se presenta como una solución diferente a la emergencia habitacional. Ese es el punto de partida.
Frente a la inacción estatal, hemos puesto en aviso a la prensa local y nacional. También a organismos de derechos humanos, porque entendemos que la represión se agudiza y las muertes aumentan. En el programa discutido desde las asambleas locales de la UP se fortalece el compromiso de apuntalar el trabajo en el norte provincial, hacia una gran constituyente, enclavada en el corazón de la ruta de la droga y la explotación finquera. Llamamos a los compañeros de la Corriente Nacional y del Frente Amplio Progresista a interpretar, interpelar y complementar nuestra posición frente a un momento crítico y próspero, al mismo tiempo, de la situación política en el Noroeste argentino.
UP Salta: integración territorial en el norte salteño
15/05/2012