«Aunque cueste creerlo, la realidad del drama de los subtes que afecta a cientos de miles de usuarios no se soluciona en cuanto al conflicto laboral, porqué ni Ciudad ni Nación cumplen con su obligación ya que miden su poder. Ciudad puede y pudo llamar a conciliación laboral, reunión que se está llevando a cabo en este momento, a cargo del subsecretario de Trabajo de la Ciudad de Buenos Aires, Ezequiel Sabor. Sin embargo, el acuerdo al que se arribe no es vinculante para las partes, ya que la competencia respecto de una conciliación obligatoria, con su respectiva homologación está a cargo del ministro de Trabajo de la Nación, es decir Carlos Tomada y no otro. Señores: reúnanse ambos con los trabajadores y la empresa a los fines de arribar a una solución integral y definitiva para todos.»
«Aunque cueste creerlo, la realidad del drama de los subtes que afecta a cientos de miles de usuarios no se soluciona en cuanto al conflicto laboral, porqué ni Ciudad ni Nación cumplen con su obligación ya que miden su poder. Ciudad puede y pudo llamar a conciliación laboral, reunión que se está llevando a cabo en este momento, a cargo del subsecretario de Trabajo de la Ciudad de Buenos Aires, Ezequiel Sabor. Sin embargo, el acuerdo al que se arribe no es vinculante para las partes, ya que la competencia respecto de una conciliación obligatoria, con su respectiva homologación está a cargo del ministro de Trabajo de la Nación, es decir Carlos Tomada y no otro. Señores: reúnanse ambos con los trabajadores y la empresa a los fines de arribar a una solución integral y definitiva para todos.»