Reproducimos la nota de Opnión de Artemio López-Director Consultora Equis-, junto con un video español interesante sobre el tema. AIG, Lehman, Fannie Mae, Freddie Mac, Merrill Lynch, Northern Rock y siguen las firmas…
Ayer escuchaba a Prat-Gay explicando la dinámica de la crisis financiera internacional,señalando además lo que debiera hacerse para
resolverla, pronosticando dónde iremos a parar, en fin haciendo uso y abuso de un discurso desbordante
de “certezas” con el que increíblemente insisten, Alfonso y muchos otros.
Lejos de este festival de maestros ciruela, nos advierte Oscar Raúl Cardoso en un artículo imperdible publicado en el matutino Clarín: Lo que ahora se discute –a partir del último fin de semana de tragedia financiera– no es sólo el futuro de otras instituciones como la banca de inversión Lehman Brothers, o aun el impacto de su caída en la economía mundial, sino la baja eficiencia del sistema de organización social y económica, el capitalismo, en su presente etapa. Ésa es la muy dura realidad con la que se enfrentan Estados
Unidos y el resto del planeta. Como lo explicó uno de los supremos sacerdotes de esa religión que en
lugar de Dios unge al mercado, Alan Greenspan, esta nueva vuelta de tuerca constituye “una crisis
que se da sólo una vez en un siglo”. Es curioso que no haya llegado a la conclusión antes, porque
hasta su último día en la Presidencia de la Reserva Federal –el banco central de Estados Unidos– y
aun después, profetizó que el “aterrizaje de la economía sería blando”. Y es sobre esta ahora única
y robusta “certeza” de ineficiencia no coyuntural sino estructural del capitalismo en la actual fase
global con la que deberemos seguir lidiando de aquí en más. Está claro por otra parte, que de esta
megacrisis no sobrevendrá el anunciado –y deseado por muchos, ¿por qué no?– “fin del capitalismo”, eso
seguramente no ocurrirá y mi amigo Jorge Altamira deberá aplazar nuevamente la concreción de sus
pronósticos. Sí, es de esperar, que la magnitud de la falla contribuya al menos por un tiempo, a ubicar
en su lugar al discurso tecnoburocrático de los gurúes, los que califican al resto bajo la presunción,
hoy sí definitivamente falsa, de que “se las saben todas” y reducen las alternativas de lo posible a la
evolución de una docenita de indicadores macro: “Los bancos de inversión de Wall Street, como
Lehmann Brothers dijeron a sus clientes que ‘los mercados han comenzado a preguntarse si la
Argentina podría estar al borde de otro default’”. En un informe titulado “La montaña rusa de la
Argentina”, advierte que “pocos participantes del mercado, si es que alguno, han olvidado los costos
y el drama asociados al default anterior. Como resultado, los mercados están
altamente sensibilizados”. En fin, si la módica montaña rusa argenta ya
“los sensibilizaba”, ¿cómo estarán “los mercados” ahora, que se quema Disney World?