El diputado Claudio Lozano, presidente del Bloque Unidad Popular sostuvo que “el Bloque Unidad Popular no acompañará estrategias irresponsables que puedan devenir en iguales o mayores problemas inflacionarios, ni tampoco el culto a las reglas y una ortodoxia neoliberal que sólo ha producido desarticulación productiva y desigualdad social.
En este sentido, si bien compartimos la necesidad de terminar con la actual Carta Orgánica del Banco Central, así como con la propia Ley de Convertibilidad, entendemos que solo puede hacerse en un marco de políticas que coloquen al Estado y su capacidad regulatoria en el centro del proceso de inversión estableciendo en qué debe desarrollarse nuestro esquema productivo y a la vez definiendo quienes son los actores principales de dicho proceso.
Los problemas que tiene la Argentina con su moneda no son independientes del tipo de patrón productivo y del carácter que ha adoptado la trasnacionalización y sus sujetos principales en nuestro país durante los últimos 36 años.
En este sentido nos preocupa un proyecto oficial que deja en manos del Directorio del Banco Central la definición (sin criterios claros a respetar) del nivel óptimo que debieran tener las reservas (casualmente en el momento donde en función de las reglas vigentes, las misma parecieran haberse agotado para el uso de cancelación de deuda estipulado por el oficialismo). A la vez, parece contradictorio con los propios postulados del oficialismo que el único uso establecido en el proyecto para las reservas sea el pago de deuda, ya no solo a los Organismos Internacionales, sino también expresamente al propio Club de París. Nada se dice de la posibilidad de utilizar reservas con el objeto de financiar el desarrollo productivo (Proyecto de Ley presentado por el diputado Claudio Lozano en el año 2010).
Por último, parece poco seria dejar abierta la posibilidad de emitir moneda y la mayor injerencia crediticia del Banco Central, sin que se especifique mínimamente la orientación que en esta materia se seguirá. Ni irresponsabilidad, ni ortodoxia neoliberal. Cambio productivo para un nuevo modelo de desarrollo.”