Nuestro instrumento electoral, está conformado por nueve partidos con personería nacional de distrito (Santa Fe, CABA, Salta, Misiones, Buenos Aires, Jujuy, Corrientes, Neuquén y Tierra de Fuego), acuerdo de participación de un partido con personería provincial ( La Rioja)y dos de personería municipal Río Cuarto (Córdoba) y Rawson (San Juan).
Contamos en ocho provincias con Juntas Promotoras con diferentes niveles de funcionamiento y de etapas por el logro del reconocimiento legal del partido nacional de distrito (Santiago del Estero, Tucumán, La Rioja, Entre Ríos, San Juan, Mendoza, Córdoba, y Río Negro).
Contando los afiliados del primer grupo de partidos reconocidos por la Justicia Electoral sumamos actualmente 35.244 afiliados, y hoy podemos decir que suman ya más de 15.000 los adherentes a la conformación de nuestra organización en las provincias donde nos estamos instalando.
Esto, a no dudarlo, constituye una verdadera proeza, fruto del trabajo militante de las compañeras y los compañeros que se ponen al hombro la construcción de una herramienta electoral en el marco de una denostada actividad política, que, justificadamente por la acción de los malos representantes dejó de generar pasión en los sectores populares.
La mayoría de estas adhesiones y afiliaciones se logran a partir de la confianza que generan los que la solicitan, y en muchos casos las propuestas y conductas de las y los referentes de cada distrito, su consecuencia y militancia, que la hacen creíble.
Este núcleo convocante y comprometido es nuestro primer nivel de organización a consolidar y fortalecer con nuestra política de comunicación, formación y desarrollo del debate político que generan nuestra estrategia de Poder.
Son ellos, somos nosotros y nosotras, el primer vínculo con los que nos prestaron su firma para que logremos instalarnos en el debate político electoral – institucional en todos los ámbitos del Estado.
Son el vínculo adecuado para establecer la línea directa con las y los afiliados y garantizar la reproducción de debate y la toma de decisiones en el marco de los debates de nuestras políticas.
Camino a construir lazos con la totalidad de nuestras y nuestros afiliados en forma cada vez más directa, debemos priorizar garantizar el funcionamiento de nuestras instancias distritales, provinciales y nacionales de comunicación -formación -debate y decisión democrática de las líneas políticas a seguir.
Esto nos requiere tiempo militancia y sobre todos recursos humanos fundamentales para su logro, como así también recursos económicos imprescindibles para su concreción.
Mucho más en las dificultades, debilidades y discriminación en las políticas públicas de financiamientos a los partidos políticos, y consiguiente dependencia cada vez más explícitas de la empresas privadas que solventan de diferentes maneras, muchas en el marco de la ilegalidad, de las campañas electorales.
Es clave entonces, nuestra vertebración con definiciones y acciones para conseguir el desarrollo organizativo mancomunado en iniciativas de crecimiento, formación, comunicación, autofinanciamiento y presencia electoral en el territorio donde se juega la existencia de la vida misma, y su proyección nacional tantas veces fragmentada.
El primer paso exige el reconocimiento de nuestras y nuestros compañeros, que aun siendo miles, todavía no asumieron el protagonismo suficiente para poder expresar la identidad que nos enorgullece: ser militantes de UP.